La serie post apocalíptica de la cadena The CW finalizó esta semana su sexta temporada con un cliffhanger que sorprendió a sus fanáticos. Si no lo has visto y quieres sorprenderte, es mejor que no sigas leyendo la nota.
En «La Sangre de Sanctum» («The Blood Of Sanctum») se mostró el enfrentamiento de Clarke (Eliza Taylor) en la nave con los originales del nuevo planeta, que tuvo su clímax cuando la protagonista arrojó a la familia de Russell (JR Bourne) al espacio, con Simone en el cuerpo de su madre Abby (Paige Turco) entre ellos.
Una vez ocurrido esto, Clarke confrontó a la pequeña Madi (Lola Flanery), quien estaba poseída por Sheidheda, y para obligarla a despertar de su trance se puso una pistola en la cabeza y amenazó con suicidarse. Una vez que la joven se libró del maligno espíritu que la controlaba, intentaron acabar con él borrándolo de la computadora, pero no será hasta el ciclo siguiente que se sabrá si lograron su cometido.
Sin embargo, la alegría no le duró mucho a los protagonistas, pues luego de la victoria contra los originales de Sanctum se abrió un nuevo misterio en la serie. Apareció un tatuaje en la espalda de Octavia (Marie Avgeropoulos), que logró abrir la «anomalía», un portal hacia otra dimensión, que durante los primeros capítulos se mostró llevándose a Diyoza (Ivana Miličević) estando embarazada.
A minutos de finalizar el episodio apareció Hope, la hija de Diyoza, pero en una versión adulta, para apuñalar a Octavia, quien cae en los brazos de su hermano Bellamy (Bob Morley) antes de desaparecer definitivamente. ¿Qué habrá pasado con la menor de los Blake? ¿Volverá la actriz en la siguiente entrega? ¿Cuál será el secreto de la «anomalía»?