Cuando se cumplieron exactos 30 años de su muerte, el mundo de la música, especialmente en Argentina y el resto del Cono Sur, ha vuelto a recordar el imborrable legado de Federico Moura, mítico vocalista del grupo Virus.
Nacido el 23 de octubre de 1951 en La Plata (el mismo día y año que Charly García) y fallecido el miércoles 21 de diciembre de 1988, los tabloides se han llenado de homenajes en memoria de uno de los grandes íconos de la ola pop de los `80, autor de los éxitos que tuvo su agrupación y también promotor de otros conjuntos que marcaron época (Moura, por ejemplo, produjo el primer disco de Soda Stereo, «Soda Stereo», 1984).
Virus debutó oficialmente el 11 de enero de 1980 y su aparición provocó un lavado de cara en la escena rockera argentina de entonces, gracias a una propuesta musical y estilística que luego adoptaron diferentes grupos trasandinos. “Con una estética particular, supo sacar al rock de la meseta conservadora para incluir a otros públicos (…). Alguien dijo alguna vez que sin Virus no hubiera existido Soda y quizás tenga razón. Más allá de que Federico les produjo el primer disco el sonido y la estética son elementos que Soda heredó de la banda platense. Virus hizo el `trabajo sucio´ y allanó el camino para que el trío liderado por Gustavo Cerati y otros grupos pudieran trascender”, señaló, por ejemplo, el portal Infobae en un homenaje al músico.
Su primer álbum, “Wadu Wadu”, fue editado a fines de 1981, y en 1987 publicaron “Superficies de placer”, el último disco en el que participó Federico. En pleno proceso de composición, el vocalista tuvo una fuerte neumonía. Como no sanaba, los médicos le recomendaron un chequeo que, ironías de la vida, reveló que portaba un virus en ese tiempo mortal: el del VIH. Nueve meses después del lanzamiento del disco, Federico ofreció su última presentación y luego eligió alejarse de la actividad para vivir en privado sus últimos meses.
Murió a los 37 años en su casa del barrio bonaerense de San Telmo a raíz de una insuficiencia cardiorrespiratoria.