Muchos son los gritos de auxilio económico que se han escuchado durante toda esta pandemia. El comercio, el turismo, la gastronomía, las pymes, los centros deportivos, los cines y salas de espectáculo, son algunos de los sectores económicos afectados con la crisis sanitaria, que se suman a las necesidades de la real clase media y la tercera edad. A este último grupo etario, con sus 87 años, pertenece justamente el reconocido pianista nacional, Valentín Trujillo, quien además es parte de una industria que también se siente invisibilizada para las ayudas: la cultural, y en específico, la de la música.
Así lo hizo saber en una carta publicada en El Mercurio, en donde describe su tristeza y preocupación por la crisis que está afectado a este sector de la creación nacional, la que se inició a fines del 2019 con el estallido social y luego continuó con la pandemia.
“Los músicos que ya contamos con varias décadas en este mundo, estamos preocupados. Hoy, como tantos adultos y adultas mayores, enfrentamos el encierro, aislamiento, la imposibilidad de abrazar a nuestros hijos y nietos, y la incertidumbre frente al futuro y la posibilidad cierta que nosotros o nuestros cercanos se enfermen. Sin embargo, hay algo que nos preocupa tanto o más que todo eso: nuestro gremio. La música”, comenzó explicando el laureado intérprete respecto de cómo este tiempo ha afectado a sus trabajadores.
Agregó que “con mucha pena vemos cómo este arte, al que hemos dedicado nuestra vida entera, ha terminado silenciándose por completo, dejando a miles de compañeros, compañeras y colegas, en una crisis tan profunda, que hoy no parece haber en el horizonte otra cosa que desesperanza”.
Al respecto, lanzó una crítica a la gestión del gobierno, expresando que las autoridades les han dado la espalda a la cultura. “Saber que artistas talentosísimos están viéndose obligados a dejar la música para sobrevivir, o que más viejos pasan sus días sin poder hacer la que ha sido su actividad y su pasión por más de 50 años, es muy doloroso”.
Sobre ello, evidenció que la música ha sido siempre un arte profundamente conectado con la gente. “Está en todas las casa, en las fiestas, en espacios públicos, en momentos históricos, en conciertos multitudinarios, en campañas políticas (…) La música celebra la vida y en mis más de 70 años de trayectoria, he podido comprobar que también puede salvar vidas. Pero hoy, cuando es la propia música la que necesita ser salvada, vemos con impotencia que ha sido dejada completamente sola y a la deriva”.
Trujillo reconoce que la situación es de “una sensación angustiante”, razón que lo llevó a clamar por un salvavidas para la música chilena. “Es un grito que no detendré mientras tenga voz y fuerza. Es urgente que el gobierno concrete ayuda real para quienes la música es nuestra vida, nuestra pasión”, enfatizó.
"Un grito desesperado por la música". La carta en que #ValentínTrujillo hace un pedido urgente para salvar la #músicachilena. pic.twitter.com/RdvIwzVvD3
— SCDChile (@scd_chile) April 18, 2021