A sus 85 años, Jane Fonda es una figura legendaria de la gran pantalla, última representante de un linaje cinematográfico iniciado en los años 30 del siglo pasado por su padre, Henry Fonda, y en el que también destacaron el hermano de la actriz, Peter (fallecido en 2019) y su sobrina Bridget, hoy retirada de la actuación.
Durante décadas ha sido además una figura que nunca temió enfrentarse a los poderes fácticos, poniendo su nombre y esfuerzos a favor de la defensa de los derechos civiles en Estados Unidos, denunciando la Guerra de Vietnam, o convirtiéndose en los últimos tiempos en una activista ambiental que hace permanentes llamados a tomar conciencia acerca de la crisis climática.
Pues bien, a Jane Fonda le diagnosticaron linfoma no Hodgkin y comenzó un tratamiento de quimioterapia. Así lo dio a conocer la propia actriz a través de una publicación en su cuenta oficial de Instagram, causando impacto en medios de todo el mundo, advirtiendo, en todo caso, que se trata de un cáncer muy tratable.
“El 80% de las personas sobreviven, así que me siento muy afortunada”, escribió en el mensaje, que acompañó con una selfie en la que aparece bien maquillada y con una chaqueta roja, muy elegante, como siempre.
Demostrando una vez más su conciencia social, destacó que es una afortunada porque, a diferencia de millones de estadounidenses que no tienen cobertura de salud, ella posee un seguro médico “y acceso a los mejores médicos y tratamientos”.
“Me doy cuenta, y es doloroso, que soy privilegiada en esto. Casi todas las familias en Estados Unidos han tenido que lidiar con el cáncer en un momento u otro y demasiados no tienen acceso a la atención médica de calidad que estoy recibiendo y esto no está bien”, destacó.
Escribió, asimismo, que “el cáncer es un maestro y estoy prestando atención a las lecciones que tiene para mí (…). Algo que ya me ha mostrado es la importancia de la comunidad. De crecer y profundizar la propia comunidad para que no estemos solos. Y el cáncer, junto con mi edad, casi 85 años, definitivamente me enseña la importancia de adaptarme a las nuevas realidades”.
Jane Fonda actualmente protagoniza la serie de Netflix “Grace and Frankie”, y aunque no se refirió al futuro de sus compromisos profesionales en curso, la actriz se encargó de asegurar que continuará con su activismo.