Cuando las noticias de Chile y el mundo se concentran en informaciones sobre la pandemia y las protestas en torno a la muerte de George Floyd y el racismo contra la comunidad afroamericana, ahora surge una nueva polémica en las redes sociales en torno a la colectividad LGBT.
Esta vez la protagonista del impasse es la escritora J.K. Rowling, autora de la saga “Harry Potter”, quien en su cuenta de twitter compartió un artículo titulado: “Opinión: Creando un mundo post-Covid-19 más igualitario para la gente que menstrúa. Estoy segura que solía haber una palabra para estas personas. Ayúdenme”. Y agregó: “Si el sexo no es real, la atracción hacia el mismo sexo no existe. Si el sexo no es real, la realidad que experimentan las mujeres de todo el mundo se borra”.
Luego de la publicación, algunos seguidores y organizaciones consideraron que sus palabras eran discriminatorias hacia otras personas que también pueden menstruar como la gente transgénero o de género no binario, como también las mujeres que, por alguna razón, no tienen el período.
Rowling, ante las críticas, explicó en la misma red su postura sobre el género y el sexo. “Respeto el derecho de toda persona trans (o TERF, en inglés) a vivir de cualquier manera que sienta como auténtica y cómoda”, pero que su propia vida ha estado marcada “por el hecho de ser mujer”, con todas las consecuencias que ello significa, y que, a su parecer, difieren de las experiencias de otros colectivos.
“La idea de que las mujeres como yo -que hemos sido empáticas con la gente trans durante décadas, sintiendo afinidad porque son vulnerables de la misma manera que las mujeres, es decir, a la violencia masculina- ‘odian’ a las personas trans porque pensamos que el sexo es real y tiene consecuencias vitales, es una tontería”, explicó.
Argumentó asimismo que conoce y ama a las personas trans, “pero borrar el concepto de sexo elimina la capacidad de muchas personas de hablar de sus vidas de manera significativa. No es odio decir la verdad”, escribió.
Por sus dichos, la británica, que tiene 14,5 millones de seguidores en la red, fue tildada de “feminista radical que excluye a los trans” por defender que el sexo biológico de las personas es real y “no una ilusión”.