Hay que decirlo: si bien vivió muchos años haciendo reír, lo cierto es que en el actual contexto, su realidad no es ningún chiste. Durante un buen tiempo, Memo Bunke fue uno de los humoristas más exitosos del país. De hecho, se presentó cuatro veces en el Festival de Viña del Mar, la última vez en la edición de 2013, no obstate la más recordada sea la del año 2000, cuando fue ovacionado por su rutina “La Mosca”.
Pero esos buenos tiempos quedaron atrás y los últimos años han sido para él más una teleserie que una comedia.
En 2021 -en medio de la pandemia, que dejó a muchos artistas sin ingresos- Memo Bunke se bajó de los escenarios para para dedicarse a reparar casas. Lamentablemente, al año siguiente le diagnosticaron fibrosis pulmonar y tuvo que dejar ese trabajo. Para colmo, no fue el único inconveniente que debió sortear.
Anteriormente, su señora había sufrido un aneurisma y su hija había estado internada en la UCI por una serie de complicaciones médicas tras dar a luz al nieto del humorista.
Como si fuera poco, en 2023, Memo Bunke estuvo internado en la Posta Central luego de sufrir un accidente y, además, ese año fue víctima de un portonazo.
Cuchara en mano
Con todas esas vicisitudes a cuestas, Guillermo Alburquenque, el nombre real del comediante, tuvo que reinventarse. Por eso hoy, alejado de los espectáculos, su ocupación es preparar colaciones.
La periodista Mariela Sotomayor lo visitó en su casa para saber en qué estaba y se encontró con que tiene un negocio culinario llamado “La cuchara del chef”, a través del cual vende almuerzos que él mismo cocina.
El emprendimiento, según le relató a la comunicadora, surgió de la urgente necesidad de generar dinero dada la falta de eventos. A ello se sumaron los diferentes inconvenientes de salud que, como familia, han estado sufriendo, Memo Bunke contó que incluso, cuando estuvo en el rubro de la construcción, se cortó tendones de una mano.
“Estaba con ideas de cosas, dije yo, algo tengo que hacer, que pueda aportar”, confidenció a Sotomayor.
Así, la actual vida de Memo Bunke gira en torno a la cocina de su hogar, donde elabora platos como pescado frito con agregado, charquicán con huevo, o tomaticán, a los que agrega postre, bebestible y pan.
“Aquí yo entrego todo el cariño, como también lo hago en el escenario”, expresó. “Es rico poder darle comida a la gente, me gusta mucho cocinar”, cerró.