Por estos días la prestigiosa publicación económica Bloomberg informó que Taylor Swift ya es oficialmente multimillonaria; es decir, que tiene más de 1.000 millones de dólares.
Una estimación que se basa en datos que se pueden rastrear, como el valor de su catálogo, que ascendería a unos 400 millones de dólares; los ingresos por sus conciertos, 370 millones; las reproducciones de sus canciones en YouTube y Spotify (120 millones) de dólares; sus cinco casas (unos 110 millones) y los derechos de autor por la venta de su música (80 millones). Todos eso ya suma 1.080 millones de dólares.
Pero es muy probable que la cantautora tenga aún más dinero en su cuenta asumiendo que puede tener inversiones que Bloomberg no pudo detectar, o incluso objetos de alto valor, como su ropa. En su actual gira, “The Eras Tour”, por ejemplo, usa vestidos que cuestan más de 20.000 dólares cada uno, además de joyas y vehículos.
Son pocas cantantes del mundo que han alcanzado el estatus de multimillonaria (otra es Rihanna) y es muy probable que Swift siga abultando su patrimonio, porque por delante le quedan muchos shows de su gira, lo que implica más ingresos.
Aunque ya tiene en su poder el dinero de la venta de las entradas (todas vendidas desde hace meses), incluyendo la ventas de productos como camisetas de algodón a 45 dólares (más de 40 mil pesos) y polerones a 75 dólares (casi 70 mil pesos), o sea, a precios no precisamente populares.
¿Decepción de los swifties?
Con tamaña fortuna, Taylor Swift puede darse los gustos que quiera. Y uno que mucho se comentó durante la semana era su supuesto interés por comprar el club de fútbol profesional más antiguo del mundo: el Notts County, de Inglaterra.
Así lo señaló un tabloide británico. De ser efectivo, la artista estadounidense seguiría los pasos de los actores Ryan Reynolds y Rob McElhenney, quienes recientemente se adquirieron el Wrexham. Pero el propio Notts County, que compite en la League Two (cuarta división inglesa), salió al paso de los rumores, desmintiendo que la famosa cantante estuviera planeando adquirir el equipo.
El club de respondió de manera ingeniosa en un comunicado, en el que hizo referencia a varias de las canciones de Swift, como “Shake It Off”, “Blank Space”, “Bad Blood”, “Style” y “Love Story”.
“Si bien esto puede decepcionar a los seguidores swifties entre nuestros aficionados, debemos negar rotundamente esta historia. No hay rencor entre nosotros y Taylor, pero en un momento tan emocionante para el club, nunca contemplamos ceder el control. Como gesto de buena voluntad, mañana dejaremos un espacio en blanco en la lista de reproducción previa al partido para su nuevo álbum ‘1989’”, señaló el equipo.