2022 fue año de luces y sombras para Mauricio Pinilla. A su aplaudida incursión como animador de televisión, se sumó el quiebre matrimonial con Gisella Gallardo, dando paso a una mediática separación, que luego se vio aún más expuesta desde comenzaron los rumores que lo vinculaban con Gala Caldirola.
La sumatoria de estos eventos ha tenido sus costos para el ex jugador de fútbol, que además ha visto cómo su nombre aparece una y otra vez en las secciones y programas de farándula.
“Me contaminaron el año con bastantes mentiras y les puedo asegurar el que el 90% son falsas. Mis abogados están trabajando en los procesos judiciales correspondientes”, comentó el deportista en “Tendencias”, programa conducido por Angélica Castro en Radio Agricultura.
Sobre la situación, Pinigol expresó su preocupación por la salud emocional de sus tres hijos.
“Nunca he querido salir aclarar nada porque mis hijos se han visto totalmente vulnerados con estas falsas informaciones. Hay imágenes publicadas y comentadas y me he quedado callado. He hecho las cosas como corresponden, pero ¿quién limpia toda la suciedad que te tiraron encima?, cuestionó el comentarista de ESPN.
A tanto escaló el tema que debió incluso realizar drásticas acciones para proteger a su descendencia. “Les tuve que cerrar el año escolar un mes antes por todas las estupideces que inventaron estos pelotudos y pelotudas”, reclamó, agregado que “el proceso que han tenido que vivir ellos ha sido irreparable. Los conflictos que he tenido con ellos, explicándoles cosas que son inventos, que son mentiras…el daño ya está”.
Por lo mismo, el ex seleccionado nacional indicó que sus tres hijos están en terapia con psicólogo y psiquiatra. “Si hay algo que me interesa es que no vulneren la mente de mis niños. El daño está hecho y lo importante es que hoy he recuperado su confianza y han entendido que, al menos la mitad de estas cosas, son falsas”, recalcó.