Las acusaciones por abuso sexual en contra del cineasta Nicolás López ya tienen un primer caído: «Sobras», la productora generadora de exitosas películas en el mercado nacional, bajará la cortina de manera definitiva.
La decisión fue acordada este miércoles luego de una reunión sostenida entre López y su socio, Miguel Asensio, finiquitando así una relación comercial iniciada hace diez años, tras el estreno de “Promedio Rojo” (2004) -la primera cinta del director-, y el fracaso de su segundo largometraje, “Santos” (2008).
De este modo, “uno de los proyectos más queridos de mi vida”, como lo señaló en alguna oportunidad el cineasta, dejará atrás un legado de producciones, que en algunos casos batieron record de espectadores. Como el caso de la trilogía que se inició con la tibia “Qué pena tu vida” (100 mil espectadores), que dio paso a “Qué pena tu boda” (205 mil) y “Qué pena tu familia” (198 mil), además de las imbatibles “Sin Filtro” (1.290.000) y su última realización, “No estoy loca”, con 592.872 asistentes.
Por su parte, Asensio, también marido de la actriz Paz Bascuñán, se dedicará a formar otra productora con nuevos socios.