Uno de los desafíos que Francisca Valenzuela enfrentará durante el transcurso de este 2023, será formar parte del team de coaches de la nueva temporada de «The Voice» en Chilevisión, donde estará acompañada de José Luis «Puma» Rodríguez, Prince Royce y Beto Cuevas.
En su primera experiencia cumpliendo un rol de coach en televisión, la cantante admitió que «es una invitación increíble, una oportunidad para apoyar y contribuir a que artistas y cantantes que quieran cumplir su sueño, puedan lograrlo».
«Acepté casi inmediatamente. Me parecía súper linda la oportunidad y un gran desafío. Es la primera vez que hago algo en televisión y me encanta que sea en este programa», comentó en conversación con Página 7.
Valenzuela aclaró si le gustaría seguir incursionando en TV. «Yo voy fluyendo paso a paso. No me cierro a nada, en general trabajo así. Me gusta ir explorando nuevas experiencias laborales y en la medida que me sienta cómoda y que sea algo auténtico, voy para adelante», respondió.
«Están buenísimos los coaches, hemos forjado carreras con nuestra propia identidad y eso me parece importante. Estoy entusiasmada, motivada y contenta con los coaches», señaló respecto a sus compañeros, agregando que «con Beto hemos cantado juntos, hemos compartido mucho, así que tengo una admiración y cercanía. Al ‘Puma’ Rodríguez y Prince Royce no los conozco aún».
Las comparaciones con Cami
Consultada respecto a las posibles comparaciones que podrían surgir con Cami, artista que cumplía el mismo rol en la temporada pasada de «The Voice», como única mujer dentro del team de coaches. «Creo que siempre están comparando a todas las mujeres, en todas las posiciones en la que están, especialmente cuando están visibles. Nos echan a competir siempre y ya basta de eso», opinó.
«Mi relación con las redes sociales es de comunicación directa, espontánea y auténtica. Por supuesto que a veces son abrumadoras, porque también es un lugar donde hay mucha mala onda», complementó su punto.
Valenzuela aseguró que «hay que tener cierto cuero de chancho, que es súper difícil. A mí igual me afecta un montón, no estoy hecha de piedra, soy sensible».
