Esta noche, a las 22:30 horas, 13C estrenará «Alambique”, un nuevo programa que busca descubrir las historias que guardan las pisqueras, productores y artesanos agrícolas en cada etapa de este mágico proceso de destilación. El espacio será conducido por Sergio Lagos, quien conversó con Fotech.cl sobre este nuevo desafío y donde también se refirió a cómo ha sido su paso por «Bienvenidos».
En el programa, que mostrará las productoras ubicadas desde Copiapó al Choapa, el periodista estará acompañado de la cocinera y sommelier experta en pisco Josefa Balanda, quien trabaja hace 10 años en la industria de este bebestible.
¿Cómo está el ánimo ante el estreno de tu nuevo programa?
Feliz, estoy ansiosísimo, con muchas ganas de que ocurra, no solo por nosotros y el equipo, si no que también por toda la gente ligada a la cultura del pisco, que de seguro va a estar viendo el programa. Creo que uno de los objetivos es que ellos se sientan respetados, queridos, valorados por su labor y creación.
Mostrarás datos sobre la realización del pisco, uno de los licores más usados en Chile ¿Hubo alguno que te llamara más la atención?
Sí, en el programa vamos a descubrir todas las fases del proceso de creación de una botella de pisco: cuánta agua, cuánta uva, qué tipo de uva, cuánto vino, qué tipo de alambiques. Si bien en todos los capítulos van a sorprenderse porque sin duda que hay un mundo de conocimientos que debiesen ser muchos más común, más masivo. Si nosotros logramos traspasar todas estas historias, toda esta cultura, a la mayor cantidad de gentes, estoy seguro que la producción del pisco y los que están involucrados en esto van a vivir un crecimiento que es lo que buscamos.
¿Cómo fue tu experiencia grabando «Alambique»?
Muy divertida, hermosa. Un regalo en estos duros días que estamos en pandemia. Nosotros tuvimos la suerte de gozar con ciertos permisos que nos permitieron ir a los procesos de vendimia en momentos en que los viajes estaban casi cancelados, pero las vendimias no perdonan, no podíamos esperar porque si no hubiésemos tenido que pasar al próximo año para poder realizar este programa. El pisco no es solo la botella, son las personas que lo hace, los territorios, los paisajes, la tierra, el agua, la fruta y fue simplemente un baño energizante y nos hizo a todos los involucrados muy bien.
¿Alguna anécdota para contar?
Están todas en el programa (risas)… entonces hay que verlo.
Entonces, ¿Por qué crees que el televidente debe ver «Alambique»?
Al igual que cuando hicimos el documento de Los Jaivas, de una de las bandas más importante de nuestra cultura, y no teníamos ese material audiovisual que nos relatara su historia, lo mismo creo que pasa con el pisco. El pisco es parte de nuestra cultura, de nuestra herencia y desarrollo, pero sabemos muy poco de aquello. Lo que la gente puede esperar, es sorprenderse. Descubrir que detrás de una botella que uno mira muy livianamente hay toneladas de cariño y amor… y muchísimo trabajo.
Después de todo lo aprendido ¿El pisco es chileno o peruano?
A ver la destilación es de la humanidad, hay estudios que muestran que durante toda la historia el humano ha intentado destilar algún tipo de elemento: papas, frutas, granos. Así poder generar licor y supuestamente lo que hace este líquido es regular ciertos espacios de nuestra química que al conectarse con el cuerpo nos hacen bien, nos ayudan. El licor tiene desde los orígenes una dimensión espiritual, cultural y también medicinal. Entonces creo que esta batalla de quién es el propietario es media absurda, porque finalmente es una acción humana el estar haciendo este tipo de brebajes, pero sí hay que distinguir que lo que nosotros vivimos alrededor del pisco es una industria muy distinta a la que tienen los hermanos en el norte del territorio. Por otro lado, nosotros tenemos, además, una denominación de origen que tiene 90 años y eso no deja de ser algo muy importante, por algo el coñac es coñac y tiene que ver con un territorio.
Pasando a otro tema, ya llevas casi tres meses en la conducción de «Bienvenidos» ¿Cómo has vivido en el programa?
Super apasionante, muy especial y yo estoy muy agradecido de la recepción del equipo. Para mí es un placer y un honor aprender de mis compañeros, creo que son todos enormes profesionales y lo único que estoy tratando de hacer es estar a la altura del momento.
Han tenido días que han quedado segundos en el rating y otros cuartos ¿Cómo crees que se puede conquistar a este público que va y viene?
No sé, no tengo una receta para aquello, yo lo único que intento hacer es enfrentarme cada día con la audiencia como si ellos fueran mis mejores amigos, tratar de conversar a rostro descubierto, mirándolos a la cara, a los ojos, intentando de profundizar y riéndonos. No tengo afanes competitivos. Si bien soy competitivo, esa competencia tiene que ver conmigo mismo y la batalla más pesada es levantarme a las 5:30 de la mañana. Si logro ganar esa batalla, ya estoy.
¿El impasse con Pamela Jiles fue el peor momento que has vivido en pantalla? ¿Sacaste alguna «enseñanza» de ese momento?
No, para nada, fue un momento. Yo creo que no tuvo tanto que ver con nosotros, como con un instante que habrá sido complejo para ella y eso además tiene que ver con lo que ocurrió después donde ella misma nos ofrece disculpas públicas. Creo que nosotros estuvimos en nuestro rol y es lo que hacemos, no solo con ella sino con todos los entrevistados que nos toca conversar.