Durante los últimos meses la sintonía de TVN ha llegado a niveles trágicos y ningún programa ha logrado revertir la situación. Sin embargo, su teleserie diurna, «La Chúcara», que escribe un equipo liderado por Sandra Arriagada, se ha convertido en uno de sus salvavidas, pues es uno de los pocos, sino es que el único, que logra aparecer en los más vistos del día.
Tuvimos la posibilidad de conversar con Arriagada, quien nos compartió sus impresiones por el mal momento que vive el canal de todos los chilenos y la ficción nacional.
¿Qué te parece lo sucedido con «No Abras La Puerta», «Caleta del Sol» y «Dueños del Paraíso», en términos de sintonía?
La pantalla de TVN está gélida y eso es innegable, sobre todo en el caso de “Dueños del Paraíso”. Lo bien que le fue en EEUU podría haber hecho eco perfectamente acá, en condiciones de rating normales, pero como están las cosas, la fidelidad de ese horario a las turcas no dio tregua. Y eso es tan funesto, para todo el gremio. Hay que dar vuelta el tablero a como dé lugar.
¿Por qué crees que se dio este fenómeno turco?
Ay, es complejo, nosotros como guionistas hemos hecho harto mea culpa, pero creo que ya está siendo injusto pensar que es un fenómeno “de contenido” y no «de industria». Y con respecto a esto último, me parece que tiene mucho que ver con nuestra idiosincracia como consumidores. Somos un país tan amante de lo importado, bajo la absurda creencia que siempre será mejor que lo de acá. Yo te digo: con los presupuestos y la libertad creativa de otros países, estoy segura que la mayoría de las plumas talentosas de este país, haría maravillas, pero al parecer nosotros mismos no nos tenemos fe entre compatriotas. Es bien triste.
¿Te parece que deberían jugársela más por las producciones nacionales?
El otro día estuve en un panel donde se rieron en mi cara cuando “OSÉ” sugerir que si los músicos habían peleado y ganado el 20% de música nacional en las radioemisoras, ¿por qué no seguir su ejemplo y como gremio audiovisual, exigir un porcentaje de producción nacional exclusiva en los canales? Y casi que me columpiaron por tener una idea tan loca, cuando en países como Canadá eso es ley hace rato, y porcentajes importantes como 40 y hasta 50%. Eso es proteger la creación nacional. Lo otro es puro blablá.
¿Cómo es que «La Chúcara» ha mantenido los buenos niveles de audiencia en un canal que no logra repuntar en ningún otro horario?
Éste es un horario de producción pequeña, por tanto mantiene el espíritu de lo colectivo y lo teatral. Yo creo que así se trabaja mejor, siempre. Con un diálogo constante de todos los departamentos de producción. El guionista con el director, el productor, hasta el elenco, y aunque no estemos de acuerdo siempre y tengamos que llegar a un consenso, siempre la producción más intimista va a llegar a mejores resultados, porque te facilita el trabajo hechito a mano, el pret a porter, que otras producciones más grandes no tienen la posibilidad, por razones de tamaño. Pero más allá del hecho de que, en chaparrones como éste, el ser pequeño te tiene más resguardado, está el tema de los personajes entrañables que surgieron, y ahí más que metodología, hay amor y sangre en las venas. Yo siempre digo: hay proyectos y proyectos. Me ha tocado trabajar en producciones donde uno hace una pega correcta, profesional, tal como te la piden. Y otros donde uno se apasiona, y se vuelca 24/7 y ya no te importa dormir menos y sacrificar los domingos, porque sientes que el espíritu de los personajes fue captado por el elenco y el dire y todos los que ahí trabajan, y se genera un “duende” como le dicen en el teatro. Una sensación de vida propia que las producciones agarran. Y eso la gente lo nota.
¿Lo dices por los protagonistas?
Laura y Vicente, para mí, están vivos. Tienen una química de la putamadre y eso me tiene tan contenta, son dinamita pura. Mérito de la pluma, de Braun y Santa María, del seco de Stagnaro. Yo siento que «La Chúcara» agarró duende. Y eso no se compra ni se hurta. Sólo se tiene.
¿Están contentos en el canal con los resultados de «La Chúcara»?
Mucho. Nos sentimos valorados por el público. Yo siempre leo los comentarios de face, el twitter, en fin. Me encanta como hablan de la teleserie y vibran con la historia. Es lindo. Me cago de la risa con algunos tuits, ¡y para qué decir en el foro de Fotech! «La Chúcara» es bien chasconeada e informal, hay harto personaje autóctono y relaciones relajadas y francotas, por lo que se genera harto decir campechano y talla pasá para la punta. La gente las capta al vuelo y las celebra ¡eso es rico! Y bueno, partiendo por la visceral de la Laura, que piropea minos, dice lo que piensa y da el primer beso, pura desfachatez y piquero al vacío! ¿De adónde habrá salido?
¿Qué se viene para los próximos capítulos? ¿Nos puedes adelantar algo?
Sólo puedo decir esto: en el amor, como en la cocina, SIEMPRE se da vuelta la tortilla.
Y finalmente, ¿qué proyectos se vienen para ti? ¿Seguirás en TVN?
Yo amo escribir, para mí es una elección muy pensada, ya que tengo dos profesiones, un master en Dirección de la empresa audiovisual y un doctorado en ciernes. Para mí los contenidos son una pasión, pero no es mi única opción. Si sigue este chaparrón, quizás tenga que resguardarme en una pega más ejecutiva. Tengo un hijo y ya no puedo pensar sólo en mí. Como jefa de guión, me estuvieron ofreciendo algo en otro canal, pero si me preguntas, me encantaría continuar aquí, y en lo posible, con el mismo maravilloso equipo que tengo ahora, los cabros de «La Chúcara» completa, produ, dire, guionistas, ¡hasta elenco! Yo confío en TVN, sé que repuntará, que es sólo una crisis pasajera y saldrá adelante. Hay que ser chúcaros ¡Y resistir!