Para Yamna Lobos, valorarse y quererse no es necesariamente una actitud egoísta, en especial si se trata de cirugías estéticas. Por eso, a diferencia de muchas otras personas que mantienen ocultos estos procedimientos para mejorar su apariencia, ella los hace públicos sin falsos pudores.
Por eso, la bailarina que se hiciera famosa en programas que, a estas alturas son históricos, como “Generación 2000” y “Mekano”, pero particularmente en “Rojo Fama Contra Fama”, de TVN, no dudó en subir una serie de videos a su cuenta de Instagram para contar que pasaría por el quirófano para realizarse un cambio de prótesis mamarias y aprovechar de corregir la caída de su busto, procedimiento llamado mastopexia.
“¡Es primordial priorizarse!”, escribió para uno de los registros, grabados en la consulta del médico que llevó a cabo la operación.
“Todo lo que afecta nuestra autoestima hay que tratarlo y/o mejorarlo… nunca será innecesario ni superficial si es para y por nuestro bienestar físico y sobre todo emocional”, agregó la también ex chica reality o conductora de televisión.
Incómoda consigo misma
En los videos, Yamna Lobos relató que se había colocado implantes mamarios en la década del 2000 y que ahora era necesario cambiarlos.
“La última vez me operé fue en 2009 y después de tantos años, siguiendo la recomendación médica, decidí que era momento de renovar mis prótesis para cuidar mi salud”, señaló.
Posteriormente comentó que su doctor aprovechó de sugerir que se hiciera una mastopexia. “Esto surgió después de haber dado pecho a mi bebé. Fue un proceso hermoso y lleno de amor, pero en el que, sin darme cuenta, ella tomaba más leche de un lado que del otro y eso hizo que mi mama derecha bajara significativamente”, explicó Yamna Lobos sobre las razones de dicha cirugía estética, refiriéndose a su hija Agustina, de hoy cuatro años, fruto de su matrimonio con el emprendedor Rodrigo Ramírez.
La decisión de someterse a esta cirugía “no fue fácil”, aseguró, pero lo hizo por su “bienestar”. “Ya se había convertido en algo que me hacía sentir incómoda conmigo misma”, puntualizó.
“Al final decidí darme este regalo de amor propio, porque creo que merecemos sentirnos en armonía con nuestro cuerpo”, reflexionó.
Y no se arrepiente. “Ya me operé y quedé soñada, tal como quería, estoy muy contenta con los resultados”, concluyó Yamna Lobos respecto de su recién estrenada cirugía estética.