«Rota. Desde el fondo de mi corazón, lo siento mucho. No tengo palabras». Esas han sido, hasta el momento, las únicas palabras que ha declarado la cantante pop tras las explosiones en el Manchester Arena después de su show en la ciudad inglesa que cobró la vida de 22 personas, entre ellas una niña de ocho años.
Durante este martes, Ariana Grande regresó a Estados Unidos luego de cancelar su gira europea tras el macabro atentado en Manchester. El Daily Mail logró captarla en el aeropuerto de la localidad de Boca Raton, en el estado de Florida, Estados Unidos, donde se reencontró con su novio Mac Miller, quien la recibió con un abrazo y un beso.
El rostro de la artista daba cuenta del mal momento que está pasando, quedando completamente afectada tras el hecho que, además, dejó a 59 personas heridas. Junto a ella llegó también su madre, Joan Grande, y una fuente cercana a la familia aseguró a la revista People que Ariana «no puede creer lo que pasó» y que «quiere estar con su familia y sus seres queridos».
Hasta el momento, el concierto que tiene agendado para principios de julio en Chile aún se mantiene en pie según los organizadores.
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