Este domingo, a las 17:50 horas, el programa de TVN mostrará cómo la ampliación del ferrocarril urbano afecta las vidas de miles de personas que viven en el sector sur poniente de Santiago.
El Rancagua Express comenzará a funcionar en el último trimestre del 2015 y su objetivo es contribuir a solucionar uno de los mayores problemas de la vida en la Región Metropolitana, como es el sistema de transporte. La Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) ya ha comprado nuevos trenes, los primeros sin uso que llegan a nuestro país, para ampliar las frecuencias y mejorar las condiciones de seguridad de la línea que da el servicio que hoy se conoce como Metrotren. Todo esto permitirá que 2,4 millones de personas se vean beneficiadas, pudiéndose trasladar desde Santiago a Rancagua y tramos intermedios, con mayor rapidez y comodidad.
Sin embargo, miles de vecinos de las comunidades aledañas a la línea, como San Bernardo y Lo Espejo, se verán afectadas por los cambios, ya que sus barrios quedarán divididos para siempre por los muros que se levantarán para evitar los accidentes.
¿Cómo conjugar estos contrapuestos intereses? Los vecinos proponen que la línea sea subterránea. Pero la empresa explica que los costos de esta obra harían inviable el proyecto.
