Hace 25 años, la llamada reina del “tex-mex”, Selena Quintanilla, fue asesinada por la presidenta de su club de fans. Y sin embargo, el tiempo no ha hecho mella en su música, imagen y el gran contingente de seguidores que aún mantienen su nombre en lo alto de música.
Canciones como “Amor Prohibido”, “Como la flor”, “Bidi Bidi Bom Bom”, “La Llamada”, “No me queda más”, fueron algunos de los grandes éxitos de la intérprete antes de su muerte. Se estima que, desde su debut, ha vendido más de 30 millones de discos.
Además, la figura de la artista ha seguido generando suculentos ingresos a su familia, quienes han editado discos recopilatorios, series, libros, ropa y maquillaje, e incluso cómics.
En esa línea, recientemente se informó que el padre de la cantante está en negociaciones con Sony Music para publicar diez pistas inéditas de la cantante, en la idea de mantener vivo el legado de la ganadora de un Grammy.
“Estamos por firmas con Sony Music (…) Tengo casi 50 canciones del catálogo de Selena, alguna de ésas fueron grabadas cuando tenía 13, 16 ó 18 años y como pueden saber, entre más joven la voz, es más aguda”, explicó Abraham Quintanilla al podcast Behind The Mic, respecto de un álbum producido por el hermano de la intérprete, quien además eligió los temas a difundir.
“Le hizo nuevos arreglos a las canciones suenan increíbles y la voz de Selena se arregló con efectos de computador que hacen que suene como si ella hubiera grabado esta mañana”, detalló Quintanilla respecto de un material que vuelve a abrir la polémica entre los fans que lo acusan de explotar la imagen de su hija y otros que le agradecen mantener vigente el legado de la cantante.