La defensa del cineasta que fue acusado por ocho mujeres de abuso sexual y laboral en la Revista Sábado la asumió la abogada que se autodeclara feminista, Paula Vial, quien ha recibido fuerte críticas en las redes sociales, las que ha calificado como «machistas».
Vial conoció a Nicolás López dos días antes de que saliera a la luz el reportaje tras ser contactada por Claudia Miralles, gerenta de Comunicaicón Estratégica de Imaginacción, y asumió su defensa luego de que el director de «Sin Filtro» le mostrara pruebas materiales de que no era culpable de las acusaciones en su contra, según consigna La Tercera.
En entrevista con el diario antes mencionado, la letrada señala que «Lo que nos mostró, las pruebas que vi, me hicieron pensar que su historia era sólida. Me hizo mucho sentido lo que me decía, lo que me mostraba y, bueno, le creí. Y como le creí, me pareció que estaba bien defenderlo».
«Le creo que no es un abusador. Como él mismo lo dice, puede haber sido un descriteriado, un imbécil, pero eso no es delito. Y yo como penalista me focalicé en probar que su conducta no es constitutiva de delito. Eso es lo que hacemos los abogados cuando defendemos», agregó.
Sobre la advertencia de que iniciarían acciones legales tras la publicación, lo que fue calificado como un acto para intimidar a las denunciantes, manifestó: «El tema acá es que no hay antecedentes, hay evidencia que contrarresta esos testimonios, algunos de ellos falsos. Nosotros no amedrentamos. Lo que me parece un problema es el lugar donde ellas eligen hacer su denuncia. Una publicación es un lugar que lo expone (a Nicolás López), o sea, es un lugar donde si su objetivo era destruir su imagen, es un objetivo claramente logrado».
«Esto genera un problema en la defensa, las garantías de cualquier imputado se ven afectadas, porque se lo destruye comunicacionalmente y de eso ya no hay mucha vuelta. Ha habido un linchamiento público, una especie de catarsis pública en que se lo sindica como el epítome del abuso, eso es absurdo. Yo soy militante feminista, pero también soy defensora y comulgo con los principios de uno y otro», añadió.
Asimismo, se defendió al asegurar que «Soy abogada y penalista. Se me ha tratado con mucho machismo al no respetar eso, mi profesión; se ha puesto en entredicho mi militancia feminista, que es real y profunda, porque es mi forma de ver la vida, y he visto cuestionamientos en mi contra que no he visto nunca en relación a hombres en casos de alta connotación pública».
«Lo que quiero hacer es contribuir a que se pueda hacer pública su inocencia y que este asunto termine bien, sin más daños para unos y para otros. También me preocupa la situación de las víctimas y su exposición. Porque todo esto de intentar solucionar temas en un reportaje provoca un nivel de exposición que ha sido dañino para todos, para ellas y para él. Porque sé que es inocente. Lo sé», sentenció.