Una herencia no muy grata que nos dejó Vasco Moulián durante su paso como Director de Programación de Canal 13 fue la llamada parrilla flexible. Hasta el día de hoy, dicha estación y todas las demás de la televisión abierta, la siguen aplicando, lo que tiene bastante molesto a la audiencia, principalmente por la corta duración de algunas teleseries y por los horarios en las que comienzan.
La última víctima de las quejas ha sido Mega, quien la semana pasada anunció un brusco cambio de programación en el prime ante el estreno de «Doble Tentación». El canal privado decidió acortar su noticiario hasta las 22:00 hrs. para luego a las 22:05 comenzar a emitir «Medcezir», situación que no se ha cumplido, pues la teleserie turca comienza pasadas las 22:15 hrs. molestando de sobre manera a sus seguidores. Esto provocó que «Sres. Papis» aplazara sus episodios hasta las 23 hrs. y no a las 22:45 hrs. como se había anunciado en un principio.
Caso emblemático es lo que ha ocurrido con las teleseries diurnas de Vicuña Mackenna. Si bien en su programación están consignadas para empezar a las 15 hrs., es pasadas las 15:15 hrs. cuando comienza un extenso resumen para recién cerca de las 16 hrs. transmitir el episodio de estreno. Primero fue con «Te Doy La Vida» y ahora pasa con «Amanda».
Otro caso ocurrido hace solo unos días fue lo que pasó en Canal 13, con sus producciones nocturnas «Kosem» y «Preciosas». Si bien la nueva producción protagonizada por Beren Saat, iba a ser estrenada en la primera franja para luego pasar a la segunda, finalmente se quedó con el bloque de las 22:30 hrs., para luego dar paso a la teleserie nacional, la que hoy por hoy finaliza pasada la medianoche.
En TVN tampoco se quedan atrás. «Un Diablo Con Ángel», por ejemplo, siempre se anunció para las 22:30 hrs. y luego dar paso a las teleseries bíblicas. Sin embargo, la historia que protagoniza Benjamín Vicuña se aplaza hasta cerca de las 22:50 hrs. y recién ahí comienza un nuevo episodio.
Lo que ocurre actualmente, nos hace añorar lo que ocurría anteriormente. Noticiarios que terminaban poco antes de las 22 hrs. para dar paso al pronóstico del tiempo y luego el prime en todo su esplendor. O también nos hace mirar con recelo lo que ocurre en países como Estados Unidos, donde tal y como se anuncia, los programas comienzan a la hora que se anuncia y los televidentes saben perfectamente lo que verán y cuándo lo verán.
¿Deberían los canales a tomar conciencia con lo que ocurre en su programación?