Cuando la existencia humana vive, como nunca antes en su historia, rodeada de una saturación de imágenes, el cómo nos ven es, sin duda, un arma poderosa para conseguir objetivos. Bien lo saben publicistas, artistas y políticos, comunicando en sus acciones y vestimenta, una forma de ver el mundo o como quieren que el resto la perciba. Una estrategia que, al parecer, Donald Trump se decidió a utilizar de manera impactante.
Y es que si bien sus electores (¡y el mundo entero!) estaban acostumbrados a su clásica imagen de hombre de negocios, hoy, el electo presidente de Estados Unidos por segunda vez, quiso dar un giro a un apariencia, dejando a todos comentando su radical estilo capilar.
Así y tal vez para modernizar su imagen, ganar el aprecio de los más jóvenes, o cansado de las bromas por su entonces peinado, Trump apareció en días recientes con un look que sorprendió a los presentes, y luego a los cibernautas tras la viralización de un video en redes sociales.
En el registro se aprecia al futuro mandatario saliendo de una conferencia de prensa en el «Trump International Golf Club» en West Palm Beach, Florida, en donde su famoso “bouffant” –peinado que se caracteriza por el cabello levantado y esponjado en la parte superior de la cabeza- fue reemplazado por un estilo «mullet”. Este último, muy popular en los años ´70, se trata de un estilo que deja el pelo más corto en los laterales y más largo en la zona superior y la nuca.
Tras las imágenes, no faltaron quienes especularon que esa ‘modernización’ no fue un hito preparado por Donald Trump, sino más bien fruto de la casualidad por efecto de la gorra que llevaba en sus manos y que se quitó un poco antes de salir del lugar.
Estilos que dan qué hablar
Cualquiera sea el caso, el hecho de inmediato dio pie para que diversos expertos en imagen hicieran sus análisis.
La ex asistente de la Casa Blanca durante el gobierno de Barack Obama, Johanna Maska, respecto de la situación comentó que los peinados siempre atraen de manera generalizada. “El presidente Trump, en particular, ha recibido mucha atención por su cabello, incluso antes del corte. Si está tratando de comenzar de nuevo (¿nuevo look, nueva persona?), espero que funcione para él y para los Estados Unidos”, señaló.
Recordó además una situación sobre este asunto, cuando en 2013, el flequillo (la llamada “chasquilla”) de Michelle Obama fue un tema global. En la ocasión, Obama bromeó, en una entrevista con Rachael Ray, que este corte era una “crisis de la mediana edad”, argumentando con ello cómo un cambio en el pelo puede iniciar un nuevo ciclo.
En tanto, la psicóloga y asesora política, Reneé Carr, analizó cómo el nuevo peinado de Trump podría representar poder y dominio. “Lo más probable es que su corte de pelo esté motivado por la pérdida de pelo y por querer hacerlo más voluminoso, y parecer más joven. También es interesante que haya escogido un corte de tipo militar”.
A su juicio, la elección del político de 78 años, responde a su tipo de personalidad extravertida. “Suele reflejar su deseo de parecer fuerte y dominante”.
Donald Trump’s hair 🔥 pic.twitter.com/vDNvlymR3u
— Tiffany Fong (@TiffanyFong_) December 18, 2024