La española Rosalía logró en relativamente poco tiempo impulsar una floreciente carrera musical, arrasando tanto en los mercados latinos como de habla inglesa gracias a su particular estilo que mezcla el flamenco tradicional con el pop, el trap, el hip hop y la electrónica.
Hoy definitivamente es una de las artistas más reconocidas internacionalmente.
Con todo, la nacida en Barcelona está demostrando ser una persona inquieta que no vive solamente de las suculentas regalías que le proporciona sus canciones y presentaciones en vivo, dado que en paralelo ha desarrollado un negocio que si bien está más en las sombras, también le está generando unas cuantiosas ganancias.
Se trata de una empresa de representación de talentos creada hace dos años y que bautizó como Motomami SL. La administra su mamá, Pilar Tobella, y en ella hay espacio para artistas de diversas disciplinas artísticas (música, literatura, cine) para quienes la firma se encarga de gestionar temas relacionados con, por ejemplo, sus derechos de imagen o las redes sociales.
Motomami está demostrando ser todo un éxito: el portal Vanitatis reveló que en su primera declaración fiscal, la empresa de Rosalía declaró ingresos totales por cinco millones de euros (4.230 millones de pesos). De esta cifra, una vez descontados los gastos y la inversión inicial para echar a andar la sociedad, quedó una utilidad final de 364.516 euros, cifra que llevada a pesos chilenos equivale a $310 millones.
Si recién en su primer año reporta este nivel de ingresos y ganancias, se puede prever un futuro brillante para la compañía de representaciones. Claramente, al parecer todo lo que Rosalía toca se convierte en oro.