La sanción había sido ratificada por la Corte de Apelaciones, fijándose así un monto de 200 UTM, pero esta decisión fue revocada por el máximo tribunal chileno, tras considerar que la broma fue: «carente de insinuaciones de orden religioso».
Todo se originó a raíz de la rutina realizada por Yerko Puchento el día 17 de mayo de 2018, en «Vértigo», donde montó su propio «funeral» y expresó: «Mi cuerpo será velado en la iglesia de la ingratitud nacional, está en la Alameda, frente a la inmaculiada Concepción», frase incendiaria que originó la denuncia.
Este hecho fue sancionado con el pago de 200 UTM, cifra cercana a los 10 millones de pesos, y posteriormente fue ratificado el fallo por la Corte de Apelaciones.
Sin embargo, recientemente, tras «un adecuado análisis de la expresión», la Corte Suprema de Chile decidió revocar la multa al canal privado, debido a que: «Desde la perspectiva puramente semántica, la expresión empleada y que se cuestiona carece de un significado establecido. A lo sumo, puede ser evocativa de diversos entendimientos de orden cultural de carácter lascivo. Tal como se ha descrito, la frase fue empleada en el marco de una rutina humorística emitida a avanzadas horas de la noche y que, en lo medular, era relativa a la propia extinción del personaje, y por completo carente de insinuaciones de orden religioso», según expresó la entidad judicial al diario La Tercera.