Durante el fin de semana, la hija de Raquel Argandoña se valió de sus redes sociales para «funar» al dueño del Grupo Encina que la «amenazó» por apoyar desde sus plataformas el movimiento social que ya lleva tres semanas en nuestro país.
Sin filtro alguno, Kel Calderón escribió: “Así que al machito dueño de una agencia que me acaba de amenazar diciendo que ‘no se le va a olvidar que yo apoyé este movimiento’ le quiero decir que de hecho ojalá no se le olvide y espero que siempre me recuerde porque como mujer con opinión propia yo no le tengo miedo”.
Posterior a ello, desde el Grupo Encina se desmarcaron de las palabras del director. En un comunicado publicado en Instagram, la firma aclaró que «el comentario de nuestro director fue a modo personal y que no representa el espíritu ni la opinión de los demás miembros de la agencia. Somos una agencia diversa, donde cada integrante tiene opiniones propias e individuales y siempre se ha respetado la libre expresión”.
Esta situación fue abordada por «Intrusos» durante este lunes, donde Camila Andrade se cuadró con Calderón y defendió su actuar en redes sociales ante los mensajes que recibió. Ahí la panelista aprovechó de detallar que el sujeto “es un hombre muy conocido en el medio por ser el gestor de grandes eventos sociales, digámoslo de alguna manera, donde se compromete un mundo publicitario muy, muy grande, donde hay lucas de por medio, donde hay marcas comprometidas con campañas y la llegada es mucho más grande al público a través de distintos influencer o distintas celebridades».
“Y entre eso, durante mucho tiempo, ha estado Kel Calderón como gran influencer de nuestro país. Ella, como bien sabemos, ha viajado en representación a distintas marcas. Y con este personaje, este ‘machito’ al cual ella hace referencia, ha trabajado no sé si en los últimos años, pero por lo menos en el último tiempo, desde que se ha dedicado en paralelo a su carrera profesional y otras cosas que se ha dedicado», agregó.
En relación a lo ocurrido con Kel, Andrade manifestó que “me parece bien la funa, porque entiendo que acá, más que un mensaje directo a ella, de parte de él, es como una amenaza. Yo lo estoy entendiendo como una amenaza. ‘¿Sabes qué? No hagas, coártate de este tipo de declaraciones, ojalá no vayas a las marchas, y menos empieza a abanderarte por la oposición, si no voy a empezar a controlar este tipo de eventos. Ya no te voy a considerar de aquí en adelante’. Me parece súper violento de parte de él…”.