Carolina Baeza, madre de Trinidad Cerda, entregó su opinión sobre la participación de su hija en «Gran Hermano» y conto cómo vivió el momento en que ella reveló a sus compañeros que era transexual. Además, confesó los temores que le genera la situación que está viviendo Trini.
Durante esta semana, luego de un complejo día, Trini Cerda conversó con sus compañeros de encierro y les reveló que ella había nacido con otro género. Ante esta declaración, su madre en conversación con LUN dice que «yo sabía que la confesión iba a venir en cualquier momento, pero no sabía cuándo».
Cuando la asistente de cabina contó su historia, Baeza sintió «susto y miedo a la exposición porque uno siempre quiere proteger y cuidar. Para mí mientras menos se exponga, más protegida está por su familia y amigos», indicó.
También, ante la decisión de su hija de ingresar a «Gran Hermano», Carolina confesó que lloró mucho «porque renunció a su trabajo y ella lo amaba. Sentí miedo a lo desconocido«.
A su vez, Carolina Baeza indicó que mientras escuchaba cómo su hija hablaba con sus compañeros de programa, se sintió orgullosa. «Lloraba con hipo. Era un llanto de poder soltar todo lo que tenía adentro. Todo lo que dijo en el programa me lo dijo previamente a mí».
Además, aprovechó la instancia para dar las gracias por el apoyo recibido tras el emotivo momento protagonizado por su hija.
El regreso a la realidad
Al ser consultada por LUN sobre qué espera del momento en que Trinidad Cerda vuelva a la realidad, Baeza señaló que «me da miedo su salida del reality. Yo quiero que mi Trini ande a pie pelado, que comparte con todo el mundo. Y sé que ahora ella es de todos, no sólo es mi Trini, y va a querer ayudar».
La madre de la azafata sabe que desde que su hija hizo la confesión a sus compañeros ésta se siente libre. «La verdad te hace libre. Y con esta libertad, nadie más va a especular. Ya cumplió su misión», agregó.
Finalmente la madre de Trinidad reflexionó que «yo siempre supe que la Trini era niñita, pero por el qué dirán, el círculo social y el peso que tiene la sociedad sobre nosotros, uno lo oculta. Pero yo siempre lo supe. No importa qué es lo que uno quiere escuchar, por eso hay que escuchar».