La noche del lunes, Martín Cárcamo se trasladó hasta Valparaíso, a la casa del futbolista nacional Mark González y Maura Rivera, en un nuevo capítulo de “De tú a tú”. Es la misma casa en donde se grabó la teleserie «Cerro Alegre» de Canal 13, en 1999.
En la entrevista, el matrimonio recordó el problema cardiaco que vivió González, sobre este tema el deportista señaló que “estoy súper bien y estoy muy agradecido del cariño de la gente. De verdad que uno nunca termina de sorprenderse, pero el cariño siempre me lo han hecho ver. Claramente fue un episodio complicado”. Sus síntomas fueron un dolor de pecho muy fuerte, pero revela que esa misma sensación la había sentido cinco o seis veces antes. Se había hecho un test de esfuerzo y un electro, y habían salido bien, pero le seguía pasando. “Esta misma sensación me vino un día domingo, y no paró más desde las 12 de la noche que me quedé dormido hasta las 4 de la mañana. Estaba con Maura. Me levanto y ella se despierta y pregunta qué pasó. Le digo ‘me voy a la clínica, me duele el pecho’”. Le hicieron exámenes de sangre y preguntas respectivas, para ser diagnosticado con un infarto, por lo que tuvieron que trasladarlo. Mark confesó que fue pensando en que le iban a dar una pastilla para el dolor, porque luego tenía que ir a dejar a los niños al colegio, pero no fue así.
“Tenía una pericarditis, donde la capita del corazón se inflama y el miocardio también. Como se va inflamando, puede llegar a un punto en que pueda causar que el corazón no bombee adecuadamente y se puedan producir paros o cosas así”, recuerda Mark. Maura se había quedado en casa, y cuándo él le avisó que al parecer era una cosa del estómago, ella se relajó y se quedó dormida nuevamente. Al despertar tipo 8 de la mañana, ve el mensaje de su marido que le avisa que es el corazón y lo van a trasladar. “Fue un proceso de angustia tan fuerte que me empezó a doler el cuerpo. Me comencé a sentir tan mal, tan débil, el estrés y todo. Hasta que pude hablar con él y me cuenta la situación. Durante todos los días me puse en todos los escenarios. Yo creo que es lo más fuerte que me ha pasado porque Mark no le toma el peso a las cosas, pero de verdad fue angustiante. Me puse en el peor escenario, miraba a los niños y pensaba en ‘¿qué les digo?’. Uno nunca se pone en el escenario de que a tu pareja le pueda pasar algo. Uno nunca piensa en esas cosas. ¿por qué yo estaba con tanta angustia? Porque esto era tan incierto. El corazón de él, las troponinas tenían que bajar y estaban subiendo”.
El futbolista estuvo tres días internado. El peor escenario podría haber terminado en una muerte súbita. Maura rememoró que “no podía ir a verlo porque no podía dejar a los niños solos. Ellos tampoco podían ir a la clínica porque estaba prohibido que los niños vayan por el Covid”. “Lo asociaron a un virus. Un virus que me atacó el corazón. Pero esta es la gran pregunta, las otras cinco o seis veces que me pasó antes, ¿eran virus también? Porque no tuve un cuadro de diarrea ni de fiebre ni de escalofríos. Me venían porque me venían. Esa es la pregunta que hoy tengo”, dice Mark.
Rivera indicó que estaba desesperada y le hacía prometer que no le iba a dejar sola. La bailarina no tuvo a nadie que la contuviera durante ese proceso, “y tampoco iba a llorar frente a él, si tenía que… ¡ay me da pena!”.
“Es que Mark no le tomaba el peso a la situación. Hasta el día que volvió, yo lo trataba como hueso santo, que no le vaya a pasar nada, no rabiar, tranquilo. Hasta que ahora está bien”. Luego agregó que “él había pasado situaciones límites con la muerte. Porque tuvo una experiencia con el fútbol. Pero no sé por qué yo tenía la sensación de que iba a estar todo bien. Esta es la primera vez que siento que lo podía haber perdido. Es la primera vez que tengo esa sensación de angustia. No sé por qué”.
Mark recordó que ha estado al límite cuatro veces. La primera fue cuando se cayó y golpeó muy fuerte en el partido de Chile-Argentina, para las clasificatorias. Ahí tuvo conmoción cerebral. Luego, cuando lo operaron de las caderas, tuvo un coágulo pulmonar, producto de la operación. Y, después en Rusia, cuando tuvo un síndrome compartimental: o le cortaban la pierna o moría de una trombosis. Dice que llegó justo al hospital. Para esta última, estaban juntos.