Este jueves 21 de marzo, TVN estrenará en horario prime, a las 22.30 horas, el programa que busca ayudar a víctimas de acoso. Fotech.cl tuvo la oportunidad de hablar con uno de los conductores del programa, Marcelo Arismendi, quien nos contó sobre el desafío que significó para él hacer este espacio, cómo ha sido trabajar con Lucía López y más.
Te vemos de regreso a las pantallas de TVN…
Sí, vuelvo a la pantalla pero nunca me he ido de acá. Desde que salí del matinal en abril de 2018 me integré al área de telerrealidad del canal para hacerme cargo de la conducción de este programa con Lucía López. Hoy se está viendo el resultado de un largo trabajo de investigación, de un equipo que ha estado conociendo cada una de las historias, desarrollándolas. Luego en la grabación, donde yo ya soy parte absoluta, y estoy con una ansiedad enorme. Creo que estar de regreso en la calle, esta oportunidad que me da TVN de hacer telerrealidad, una vez más, me ha hecho sentir latir la guatita nuevamente fuerte. Me siento en el espacio al que pertenezco por sobre los demás.
Y son temas complejos. Tú mismo adelantabas que te han tocado casos en que no dan ganas de involucrarse más…
Me pasa que me comprometo y genero una empatía grande con él o la protagonista. Cuando vamos a cerrar las historias o vamos a encontrar algún desenlace con alguien que tiene finalmente la responsabilidad de todo lo que ha pasado, de verdad me pulsa mucho más fuerte la sangre. Me hierve cuando veo tanta injusticia y cuando veo cosas muy tristes que le pasan a personas que no cuentan con el apoyo necesario para defenderse y a veces se les pone el pie encima porque no tienen cómo decir ‘esto me está pasando’, o porque tienen miedo, o les dicen que las van a marcar como una persona conflictiva, en fin. Son tantas las salidas malas que hay… Creo que en este programa vamos a abrir esas puertas y esas ventanas para que este tipo de casos, si le está pasando a alguien más diga ‘hey, se puede hacer algo’. El gran desafío es que las autoridades le van a poder poner el ojo a ciertos puntos que hoy día parecen faltas graves y, perfectamente, podrían ser con penas privativas de libertad. Por eso también me tiene tan apasionado que podamos ver el resultado de estas historias y ver qué le pasa al público, qué opina la gente en redes sociales.
El primer lanzamiento de “Acosados” se vivió en el Festival de Olmué, ¿has podido ver la reacción del público ante lo que han contado?
He leído, he visto, se repite mucho el ‘se ve bueno’ y yo les puedo decir que sí. Si se ve bueno, no se van imaginar lo que va a pasar con la forma en la que se cuentan estas historias, porque tienen una agilidad, una rapidez, una claridad… Poder presentarles a ustedes como público lo que queremos, y luego vienen los desenlaces que son muy adrenalínicos. Y viene muy sorpresivo, porque uno puede decir que hay una presentación, un desarrollo y un final, pero a veces no necesariamente. Y ahí, en esa forma de contar que tenemos, creo que va a estar la diferencia.
Tú eres padre, y uno en ese rol tiene otras sensibilidades a ciertos temas. ¿Te han tocado casos con niños?
Me pasa que acá, la empatía como conductor con las personas que están al frente mío, los puedo ver como padres, como hermanos, como hijos, como pareja, como madre. Es súper potente, porque en cada caso siento que si es una mujer de la edad de mi madre, pienso que le podría estar pasando a ella. Si veo una mujer joven pienso que ella podría ser mi mujer, perfectamente. O, ella podría ser mi hija o mi hijo, y lo viví en carne propia en las historias. Lo complejo de esto, y que a mí me cuesta mucho pero lo agradezco, es sacarme la historia de encima, me quedo pegado en cómo están nuestros protagonistas, en cómo lo están pasando. Afortunadamente este programa nos da la oportunidad de saber qué ha pasado con ellos después de meses.
¿Cómo te sacas los casos, ese peso de encima?
Estoy generando algo que es totalmente lo contrario a sacárselo, me lo estoy colocando. Buscando la fórmula de que cuando esto se vea, se sepa, cuando la gente lo pueda entender, poder seguir trabajando en esta línea. Estamos muy al debe en Chile y con la experiencia que he logrado rescatar con todas estas historias, quiero ponerlas al servicio de muchas personas más y para eso estoy trabajando en proyectos personales que me van a permitir en otros tiempos libres contar estas experiencias y decir ‘esta es la forma’, ‘de esta manera podrían ir mejor las cosas para esta persona que está pasando por esta situación’. Mi llamado personal es no olvidar, sino por el contrario, trabajar, procesar, y tratar de difundir, más allá de las redes sociales, más allá de la misma TV, lo que está pasando aquí. Agarré una banderita de lucha que voy a poder expresar más libremente cuando ya conozcan los casos.
¿Pero por cuál vereda te irás?
Por la vereda de la prevención y por decir ‘esto, hasta acá está bien, de aquí para allá no está bien’. Hay que partir de la base que si a ti te molestó, está mal. Esa es la base de cualquier cosa, seas hombre, mujer o niño, si te molestó es que algo anda mal y desde ahí hay que poner atención y hablarlo con el entorno, entonces el diálogo con los familiares, con los cercanos, es la primera llave para poder ponerle atajo a los acosos de todo tipo.
¿A qué grupo de personas está dirigido este programa: Jóvenes, adultos, padres, etc.?
Creo que lo pueden ver desde los adolescentes hacía arriba. A los niños se le podría hacer un poco complejo quizás entender las situaciones que se viven en la realidad de los adultos, pero somos nosotros los papás los que debemos contarles la película para que ellos la entiendan. Va a ser una forma de entender, empatizar, aprender y de reaccionar. Es un coscorrón a quien le corresponda, de ponerse el poncho a quién le quepa, es un tironcito de orejas a quién se esté quedando dormido y este programa le da una oportunidad a nosotros, los hombres, les hablo a los de mi género, a todos esos que hemos sido alguna vez trogloditas en la vida y que hemos ido evolucionando porque hemos ido creciendo y otros que se han quedado pegados. Nosotros no podemos quedar indiferente ante las acciones de nuestros congéneres que se pasan de la rayas.
En este programa trabajas con Lucía López, una feminista de tomo y lomo ¿Cómo ha sido trabajar con ella?
Ha sido especial porque tenemos visiones distintas y parecidas. Ella tiene una bandera de lucha muy potente, que la comparto, pero también tengo mi visión de hombre, que desde niño uno es medio tontorrón, mientras más conozco a los hombres más me gustan las mujeres, eso te lo digo en serio. Entonces se juntan estas dos opciones, está mujer que tiene súper claras las prioridades de la igualdad y este hombre que viene de la transformación de un niño que hace leseras a un adulto, padre, que ya creció y se dio cuenta que mi género, el masculino, debe mejorar aún más, estamos en pañales y somos muy tontorrones todavía. De verdad hago mea culpa muchas veces y digo ‘perdón por compartir el género con algunas personas que aún no entienden que esto ya no va más’. Pero insisto, en este programa también hay que tener en cuenta que no solo vamos a ver a mujeres acosadas sino que igual hay hombres, esto le puede pasar a cualquiera, incluso te diría yo que para los hombres es más difícil hablarlo y ahí también hay un desafío importante, porque hay mujeres que también comenten ese error, que están atrasadas, que están en el camino de la desigualdad tratando de hacer sentir a hombres de una manera que no corresponde.
De hecho muchas veces los hombres no denuncian por el tema social y porque no quieren que la gente sepa que una mujer les pega.
Acá vamos a ver a mujeres acosando a hombres, hombres acosando a mujeres, hombres acosando a hombres, mujeres acosando a mujeres… se van a dar todas las fórmulas, por eso creo que va a ser un punto de atención especial, que hay que contarlo cómo es, pero hay que contarlo bien, con agilidad para que la gente también lo entienda y se meta en la historia. Una de las principales gracias de este programa es precisamente contar la realidad pero con una dosis especial de empatía con el público para que lo entiendan rápido, para que se queden ahí, para que se sientan motivado y para que de verdad tratemos de traspasar desde nuestra realidad, ahí en la grabación, a la pantalla esa adrenalina que te corre por las venas cuando ves estas situaciones de este tipo, nadie va a quedar indiferente. Cada historia que vean en «Acosados» les va a causar algo, que puede ser un aprendizaje, lección o eso de yo podría ayudar desde este punto de vista y esa es la que más me gusta y la que me hizo clic a mí. Yo quiero ayudar desde mi tribuna hoy en día para que estas cosas no sigan pasando ¿Cómo? Ya tengo una idea pero se las voy a contar cuando el programa salga al aire.
Cuando se vio la promoción muchos recordaron “Espías del Amor” ¿Tiene algo de ello?
En “Espías del Amor” había mucha suplantación y gente que se dedicaba con falsas identidades a molestar a otros, o encantar y embaucar. Pero sabes qué, hay que ser súper franco y decir las cosas como son. Si quieres que te lo diga de una manera simple, de mi pasado en Espías tiene, porque tiene la agilidad de contar la historia como con onda, que te cautive, tiene eso. También tiene un poco de “En Su Propia Trampa” porque vamos a enfrentar a los victimarios y sí, puede tener ese matiz de ese programa que fue exitoso e incluso te puedo decir que también hay algo de “Informe Especial”, porque tiene una capacidad de investigación súper profesional, muy acabado, al estilo periodístico a la antigua, bien hecho. Entonces si metes cada uno de esos ingredientes pues claro que vas a encontrar un poquito de cada uno, pero «Acosados» va a ser un producto que va a tener un estilo o una forma única basada en otras experiencias televisivas, para mí esto es telerrealidad y ésta puede ser un día una cosa de humor, otro día puede ser súper de entretención, en otro ser algo serio y acá vas a encontrar cosas muy serias pero que te van a provocar desde ternura a rabia, te van a provocar emociones y también alegrías.