Desde que saltó a la fama en el mundo virtual, la influencer ha protagonizado un sinfín de polémicas. Una de las más controversiales ocurrió en 2019 en Caldera, región de Atacama, cuando la celebridad de internet se grabó desnudándose dentro de la iglesia San Vicente de Paul.
Recientemente, fue la propia Naya Fácil quien recordó cuando se bajó los pantalones y mostró sus pechos al interior del recinto religioso. Como la joven se grabó y los registros se viralizaron rápidamente, las autoridades comunales se querellaron en su contra por utilizar un espacio patrimonial de manera totalmente irrespetuosa, según se dio a conocer en un comunicado por aquel entonces.
Fue a través de sus redes sociales que la intérprete del tema «Show, show» le explicó a sus «facilines» (fanáticos) que la formalización se concretará el próximo 28 de septiembre, por lo que está sumamente nerviosa. En esa línea, según lo que Publimetro recogió, la influencer relató que fue citada por la Municipalidad de Copiapó para declarar.
«Hasta aquí llegó la felicidad ¡Medio tete en el que estoy metida!”, expresó de entrada en una serie de videos que publicó en sus plataformas virtuales. “Este miércoles, toda su fe puesta en mí, porque me van a formalizar (…) ahí el Magistrado va a decidir qué es lo que pasa con Naya Fácil”, señaló luego, entre risas nerviosas.
“Jamás en mi vida pensé mi vida o mi futuro iba a depender de alguien más (…) Voy a guardar silencio, no voy a decir nada en contra de la alcaldesa de Caldera, nada, me voy a quedar piola hasta que se sepa si realmente me van a sentenciar. La media volaita (sic)”, reflexionó luego.
Al contemplar la posibilidad de irse «preciosa (presa)», la emprendedora se mostró sumamente angustiada, así que envió un peculiar mensaje a las «chiquillas de Colina». «Yo nunca le he tenido mala a ustedes, ¿Cómo están?, ¡Ay hue…, estoy cag…dísima! Saludos a todas las cabras privadas de libertad”, dijo a modo de broma, intentando simpatizar con las reclusas ante un inminente encierro.
Sin embargo, Nayadeth Neculhueque se equivocó, ya que el establecimiento carcelario de Colina es sólo para hombres. Por eso, más tarde ese día, cuando pasó por San Miguel, corrigió su error y saludó a la cárcel de mujeres de la comuna.
Cabe destacar que cuando recién se supo que el municipio de la localidad nortina se había querellado, Naya no le tomó el peso y le bajó el perfil a la situación. Luego, argumentó que su actuar correspondió a un gesto contestatario contra los curas. Eso sí, aclaró que no tenía nada contra la religión o sus creyentes.
De esta manera, el próximo miércoles se sabrá qué pasará con la joven, que inicialmente aseguró que sólo le pediría disculpas a la «gente creyente si sintieron pasados a llevar». «Quizás no fue el lugar apropiado o la manera, pero ya está”, manifestó.