La caída de Madonna durante su presentación en los Brit Awards celebrados esta semana fue objeto de comentarios y memes en las redes sociales. Pero basta ya. Por mucho que haya sido un momento divertido, para la cantante fue más que nada doloroso.
A pesar de seguir con el show tras el accidente, la intérprete de «Like a Virgin» tuvo que recurrir a un médico, porque gracias a la caída se golpeó la cabeza y por eso estuvo bajo vigilancia médica por varias horas.
«Sé caerme. Me caí de mi caballo varias veces. Tengo fuerza pero el hecho es que sufrí un esguince cervical y me golpeé la nuca y alguien tuvo que velarme hasta las tres de la mañana para tener la seguridad de que estaba ‘compos mentis’ (sano juicio)», dijo la cantante en una entrevista a la señal ITV y que será transmitida en marzo.
Para explicar su caída, hay que culpar solo a una cosa: el nudo de la capa. «Al llegar a lo alto de la escalinata quise deshacer el nudo. Pero el nudo no se deshace y mis dos encantadores bailarines japoneses casi me estrangulan en el escenario. En ese momento tenía la opción de terminar estrangulada o caer con la capa. Y al final caí», explicó.
