Durante años Aline Küppenheim fue un rostro fijo en numerosas telenovelas. Sin embargo, desde hace casi 20 años se encuentra totalmente alejada de ese tipo de producciones, y no porque los canales hayan dejado de llamarla: es una decisión absolutamente voluntaria de su parte.
La actriz está por estos días promocionando la película “Quizás es cierto lo que dicen de nosotras”, que se estrenará el 7 de junio. La cinta está basada en la historia de la Secta de Colliguay, que lideraba Ramón Castillo Gaete, más conocido como Antares de la Luz. En ella encarna a una psiquiatra llamada Ximena.
En el contexto de este próximo lanzamiento en las salas de cine, Küppenheim fue entrevistada por The Clinic y aprovechó de conversar acerca de su presente fuera de una pantalla chica sobre la que tiene una mirada muy crítica.
“Decidí no seguir en los espacios de las teleseries, porque no es donde me siento cómoda y tengo mi reparo. No tengo nada contra mis colegas que sí lo hacen, al contrario. Pero no es un espacio para mí”, sentenció.
Recursos desaprovechados
Por eso, hoy la intérprete está enfocada en la compañía “Teatro y su doble”, que creó hace 20 años y se basa en representaciones con marionetas. Y, por otra parte, en filmar series y películas.
Küppenheim cree que todos los involucrados de una forma u otra con la TV están desaprovechados: directores, productores, camarógrafos e incluso los televidentes.
“Si bien lo han dado por muerto, (la televisión) sigue siendo el medio de comunicación masivo más importante. Es un instrumento tan maravilloso como nefasto, dependiendo de cómo lo hagas y cómo impacta la sociedad, cómo tú lo abordas. Puedes construir una mejor sociedad o una peor sociedad”, comentó.
«Cosas no tan buenas»
A la actriz le inquieta la escasa calidad que observa en las telenovelas chilenas del presente. Dijo que hay excelentes directores, guionistas, actores y técnicos que permitirían hacer cosas muy buenas, “pero eso es menos rentable que hacer cosas no tan buenas”.
“A mí, sobre todo, lo que me preocupa es lo que le estamos… le están -porque yo hace muchos años que no estoy en televisión- ofreciendo a un público que creo que merece mejores cosas”, señaló.
Agregó que le apena que existiendo unos recursos humanos capacitados para desarrollar proyectos de calidad, no se hagan “por una decisión que tiene que ver con el mercado”.
Aline Küppenheim es tajante: sostiene que la televisión no debería ser una mercancía como otras. “Creo que debería tener otro tratamiento, no entrar en la lógica del mercado, porque afecta demasiado todo el funcionamiento de una sociedad”, concluyó.