Carla Jara será la gran protagonista de la edición de este viernes de «Podemos Hablar«, donde hablará en extenso de lo que fue su quiebre con Francisco Kaminski, quien hace solo unas semanas reconoció que está en una relación con Camila Andrade, luego de las acusaciones de infidelidad.
En un adelanto exclusivo que tuvo acceso Fotech, de entrada, la ex «Mekano» se dirigió al bar para hablar con Julio César Rodríguez, quien de entrada le preguntó cómo estaba con el fin de su matrimonio. «Ha sido terrible para mí, pero si hoy estoy acá y la gente me ve más entera, es porque esto viene desde febrero, entonces de febrero que estoy llorando, ya no me quedan lágrimas«.
Jara comenzó su relato de manera cronólogica, donde comenzó a relatar cuándo comenzaron sus sospechas de que algo no estaba bien en su relación. «Yo empecé a sospechar, porque me llegaban mensajes de textos, mensajes por Instagram que me decían ‘ojo con tu marido y la Camila’, gente que trabajaba en el equipo de ellos, entonces yo le decía: ‘Me llegó esto’. Se lo transparenté siempre… Él se justificaba que era gente mal intencionada que le quería hacer daño a nuestra relación».
«Frente eso, empecé a esa cosa que te empieza pasar en la guata, que uno como mujer siente y que las mujeres van a entender… Porque es un sexto sentido, que tenemos, no sé. Y entonces empecé a poner ojo y esto fue en enero. Tú puedes ver su Instagram que pasamos la Navidad juntos, no sé, el mismo Año Nuevo, donde él pone ‘la familia unida, jamás será vencida’. Entonces cuando empiezo a sospechar todo esto, le digo: ‘¿Qué esta pasando?’. Que me dé una explicación y él me dijo que ‘no pasaba nada, que no me pasará rollo, que él me amaba, que ella era su compañera de pega y que no pasaba nada‘. Pero en los mensajes eran ‘ojo que ellos salen juntos a tal lugar’, ‘fueron a almorzar juntos’, que ‘están sentados juntos’, que se desaparecen del estudio», continuó.
A raíz de esto, Carla Jara se dio cuenta que «chuta, de verdad, algo está pasando, y empecé a poner ojo y empecé a preguntar más cuando él estaba grabando, porque eran dos días a la semana que él grababa. Después de eso se empezó a poner mucho más notorio, que las grabaciones terminaban a las una y media de la mañana. Está claro que nadie termina a esa hora de grabar y yo le decía: ‘¿Qué pasó con la grabación?’. ‘No es que se demoró la grabación, es que no ha llegado no sé quién’. Ba bla bla, justificación tras justificación, sin embargo, yo le sigo creyendo».
El Festival de Puente Alto
Carla Jara también relató en «Podemos Hablar» lo ocurrido en el Festival de Puente Alto y lo que vivió previo a que se fuera de la casa.
«Después me dice que tiene que animar el festival de Puente Alto y yo le digo ‘ah que buena onda, ¿y con quién lo animai?’. Y me dice ‘con Camila’. Yo le digo: ‘Tienes prohibido darte el beso‘, y me dice, ‘pero Carla, ¿por qué?’. ‘Porque ya son demasiadas las cosas que tengo, entonces creo que no es correcto que te des el beso’. Y me dice: ‘Piénsalo bien’. Quise creer en su palabra, y cuando se va ese día al evento, yo le digo ‘dale, si la gente lo pide dale igual el beso’«, explicó.
Con respecto al beso que Kaminski se dio con Camila Andrade en el evento, al ser consultada si lo vio, la ex «Mekano» contó que «yo lo vi, pero él no me contó hasta que me enteré por una persona que me manda el beso por Instagram«.
«Yo no me enteré de ese beso hasta dos días después que me llega un mensaje que estaban coqueteando detrás del escenario, que se los vio muy juntos, que se los vio pasándolo bien. Y yo le pregunto: ‘¿Kami te diste el beso con ella?’. Y me dice ‘ahhh… sí’, como si no hubiera sido nada. ‘¿Qué tipo de beso?’, ‘Nada un piquito’. Yo vi el video y me parece una falta de respeto hacia tu mujer, ese coqueteo… dijo que no tenía importancia».
Posteriormente, a Jara le llamó la atención que Kaminski se fuera a las cuatro de la tarde al festival, cuando el evento recién comenzaba a las nueve de la noche. Ahí contó que él le explicó que «no manejo eso» y que se tiene que ir en van. «Pero después descubrí mensajes de texto donde ellos se juntaban antes del evento a tomar, a conversar o a lo que fuera, se juntaban antes de irse al evento a estar juntos y una cantidad de mensajes», acusó.
Las tortuosas vacaciones en Brasil
Posterior a lo ocurrido en Puente Alto, Carla Jara contó en «Podemos Hablar» que a inicios de febrero se fueron de vacaciones a Brasil junto a unos amigos, el cual ella pagó porque Kaminski no tenía dinero. En eso, quiso dejar en claro que el rumor de que «veníamos mal hace meses es falso. Fuimos con un grupo de amigos, salíamos, lo pasábamos bien, salíamos a comer todos juntos, otras veces salíamos comer los tres solamente», indicó.
Pero todo cambió cuando su hijo Mariano fue el que encontró el mensaje de Camila Andrade en cuestión. «El cómo fue super rudo, porque el que encuentra el mensaje es mi hijo. Mi hijo es el que encuentra el primer mensaje y no voy a profundizar en eso porque me duele, porque es un menor de edad y no lo quiero hacer partícipe de esto… Para transparentar todo fue así y él me lo muestra», señaló.
Allí detalló que el mensaje «decía ‘ok, hablamos después. Te quiero mucho‘. Nosotros nos íbamos al carnaval en la noche y el Kami estaba tomando una siesta en ese momento, es por eso que mi hijo toma el teléfono, porque pensaba que había llegado la persona del tour para buscarnos para ir al carnaval y se encuentra con este mensaje. Y las conversaciones hacia arriba borradas, entonces yo le digo a Kami: ‘¿Qué significa esto? ¿Por qué te está escribiendo hoy, cuando estas de vacaciones con tu familia? Están todas las conversaciones borradas hacia arriba’… ‘¡Ay! No te vengai a pasar rollos de nuevo, es mi compañera de trabajo’«.
«Un compañero de trabajo no te escribe en vacaciones. Segundo, no te escribe ‘te quiero mucho, hablamos después’… Obviamente Kami se hizo el loco y se fue de la habitación y me dejó con mi hijo en muy mal estado, en shock. Cuando sale de la habitación por declaraciones de ella, sé que salió hablar con ella… Para advertirle que yo ya había encontrado los mensajes. Ahí quedo la embarrada, estábamos en otro país, no podía agarrar el auto e irme donde mi mamá», contó.
«Era un mensaje de Camila…»
En medio de eso, además, recalcó que «tenia que aguantar un par de días en ese lugar, por suerte que estaba con ese par de amigos para contarle lo que sucedió… Todos en shock, te lo juro… Él sale esa noche, y cuando vuelve, le digo ‘quédate con mi hijo, necesito tomar aire’. Entonces yo salgo a la terraza del edificio, hotel, fumo y me tomó una caipiriña, para pasar las penas… Kami en un momento sube a buscarme, para que baje que por favor no piense tonteras y le digo ‘déjame sola, para pensar’. Él baja y en media hora bajo, y él estaba durmiendo. Yo me voy acostar y antes de acostarme suena su teléfono y era un mensaje de Camila Andrade a las dos de la mañana«.
Es ahí cuando Carla Jara revela en «Podemos Hablar» que decidió ver el mensaje y habían otros dos borrados. «Después había un mensaje: ‘Hola, no sé si puedo hablar ahora, ¿puedes hablar?’. Y yo le pongo ‘sí puedo hablar, ¿qué pasó?’. ‘Es que no sabía si hablarte, si decirte, no sé’. Entonces le pongo: ‘¿Qué borraste arriba? ¿Qué pusiste en los mensajes de arriba?’. ‘No nada, es que no te quiero decir nada más’. Y yo le digo: ‘Ya po’, cuéntame. ¿Qué onda?». Y me dice, ‘soluciona tus temas y después conversamos lo nuestro'».
Con eso, la también animadora reconoció que «fue como, te juro Julio, que para mi fue un puñal en mi corazón. Eso me comprobaba mis sospechas. Y yo le respondí, y le puse no de muy buena forma, por supuesto, en ese momento estaba muy enojada y furiosa y se me apretó la guata».
«Y le pongo: ‘Eres tan tonta, que no te das cuenta de que estás hablando conmigo. Soy la Carla, pero ya con esto me queda claro, que todas las dudas que yo tenían son reales, no puedo creer que seas tan mala gente, de estar metiéndote en un matrimonio y yo sé que la culpa es de los dos, uno no deja entrar al otro, sin que le des permiso’. Pero ella sabía que él estaba en un matrimonio, sabía que estábamos de vacaciones. Yo creo que quería que yo me enterara», aseguró.
En esa misma línea, indicó que mientras Kaminski dormía, le dijo «un montón de cosas: ‘Claro te pillé, me voy a encargar que todo el mundo sepa, la clase de mujer que eres’. Ella no me responde hasta el día siguiente, que le responde al celular de Kami, diciéndole que ella no tiene nada con Kami y que yo le tengo celos, que son muy buenos compañeros. ¿Y en qué momento surgió esta amistad Que yo no me entero?… Él me decía: ‘Yo no la pesco, yo no hablo con ella'».
Posterior a eso, despertó a Kaminski. «Le digo: ‘Oye te está hablando tu mina’. Y él despierta como: ‘¿Qué pasa Carla? ¿Por qué te metiste en mi celular?’. Y yo le digo, ‘porque te acaba de llegar un mensaje y lo respondí. No podí ser más mentiroso, de verdad me defraudaste‘. Él se para y va al baño y en eso yo me acosté y me quedé dormida, la verdad es que estaba tan mal».
La pesadilla de marzo
Los dos días que le restaban en Brasil, Carla Jara no lo pasó bien, pero por el bien de su hijo, con Kaminski intentaron disimular. Ya en Santiago, el periodista comenzó a dormir en la pieza de su hijo hasta que pudieran resolver su relación porque habían terminado.
Dos días después, él le pidió que conversaran. En su auto, le pide perdón «que me ama por sobre todas las cosas, que no quiere romper su familia, que somos los más importante que él tiene en su vida y que… Que quiere que yo le pida (algo) para perdonarlo… En ese día, él me reconoció y me dice que estaban teniendo algo y que habían mucho coqueteos entre ellos. Que lo que me escribían era real, pero que él no quería nada serio con ella ni nada. ‘Por eso te estoy eligiéndote a ti, porque te amo, porque eres la mamá de mi hijo, eres mi mujer'».
«Y yo le digo: ‘No te voy a pedir nada, sino que tú me digas que estas dispuesto a hacer para que yo te perdone’. Él me dice, ‘voy a renunciar al programa’. Al programa donde ellos trabajaban, y yo le digo ‘Perfecto, me parece súper bien’. ‘Además voy a tomar terapia, voy a ir al psicólogo, al psiquiatra para entender por qué me pasó esto y para volver hacer la familia que éramos'», agregó.
Posterior a eso, relató que «llegamos a la casa, le contamos a Mariano que estábamos juntos, que estábamos bien, que todo iba estar bien con el papá y la mamá. Y todo comenzó estar normal, esto fue el 13 o 14 de febrero. 14 de febrero donde sube una foto en Instagram y pone: ‘Quiero agradecer a la vida por darme a esta mujer maravillosa, increíble, que siempre le voy agradecer todo’. Y estábamos bien. Hasta que llega un día lunes y me dice que lo llaman del canal: ‘Me están pidiendo que grabe dos semanas más el programa’. Y yo le digo: ‘Pero, ¿por qué?’. Y me dice que el otro programa que iba el domingo lo bajaron y lo cambiaron de fecha».
«Ah, sí, estoy grabando…»
«‘Me piden que no me desaparezca este mes, entonces me piden grabar martes y miércoles y la otra semana martes y miércoles'», le dijo Kaminski. Tras esto, Carla Jara contó en «Podemos Hablar» que «llegó el primer día de grabación, todo bien. Cinco de marzo, primera semana de marzo todo perfecto. Llega a las nueve de la noche. Raro, porque venía llegando muy tarde, pero bacán. Al día siguiente pasó toda la mañana (en la casa), donde él no me habla«.
«Le escribo tipo 12: ‘¿Oye, ya llegaste al canal?’. ‘Ah, sí, estoy grabando, no puedo hablar’. A las cuatro le preguntó si paró almorzar y me dice, ‘sí, pero solo 15 minutos’… Ese día llega y digo ‘algo pasó’. El miércoles hay un tipo de acercamiento y él cambia automáticamente su actitud conmigo, y el jueves nuestra relación se puso color de hormigas», agregó Carla Jara en «Podemos Hablar».
A esto se refería a que «discutimos» y «el viernes me dice que va a una reunión a las diez de la noche… ‘Sabí, no podemos dilatar esto, te vas a quedar acá en la casa hasta después del cumpleaños de Mariano’, que era el 18. ‘Esta semana sigue durmiendo arriba'», dijo. Seguido a eso, relata que él le asegura que «terminó conmigo y fui yo la que le dijo ‘tienes hasta el 19 para agarrar tus cosas e irte de la casa’. En un momento quise irme de la casa, pero la psicóloga de mi hijo me dijo que no es bueno… Ahí se rompe todo».