A principios de abril, el ex futbolista y actual rostro de TVN reveló en su cuenta de Instagram que hubo un quiebre definitivo en su matrimonio de 16 años. Por ese entonces, el propio conductor de «Buen Finde como su y su ahora ex esposa fueron blanco de varios rumores sobre los motivos de la ruptura.
Si bien, Mauricio Pinilla fue quien confirmó en sus redes sociales la separación, Gissella Gallardo solo se refirió brevemente a la situación en la misma plataforma, aunque no entró en mayores detalles al respecto, hasta ahora. En conversación con LUN, la empresaria rompió el silencio y confesó cómo ha sido vivir el proceso de divorcio.
“Creo que hay lazos familiares imposibles de quebrar. Yo adoro a sus papás y a sus hermanas, para mí son parte de mi familia y lo serán siempre. Sobre todo, porque con mis cuñadas, tengo más una amistad y, mientras no incomodemos a nadie, lo seguiremos siendo” , explicó de entrada.
Sobre Pinilla, Gallardo señaló que siente mucho aprecio por él y que su objetivo en conjunto es poder criar saludablemente a sus hijos. “Le tengo un gran cariño y ambos estamos poniendo de nuestra parte para ser los mejores padres para nuestros niños”, sentenció.
Asimismo, aseguró que la situación la han sobrellevado con madurez y eso ha sido un factor favorable en todo el proceso. «No te destroza tanto como a los 20, más aún cuando tienes la tranquilidad de que hiciste todo bien: amaste, fuiste fiel, acompañaste, vibraste con sus éxitos y fuiste su hombro en las derrotas”, reflexionó.
De igual forma, manifestó que está «en paz consigo misma», porque aceptó «que las cosas no funcionaron y eso, de alguna forma, te deja en armonía contigo. Y hoy solo quiero tranquilidad y enfocarme en las cosas importantes de mi vida”, afirmó.
Igualmente, confesó que ha sido difícil para ella pasar por un divorcio justo cuando a su padre le diagnosticaron cáncer. “Fue rudo, aún no me siento 100% bien todos los días, por el tema de mi papito, pero uno tiene que seguir, sobre todo por mis niños. Como digo yo: hay días buenos y días malos. Pero en general, hoy son más buenos que malos”, dijo.
En ese aspecto, Gallardo indicó al medio que ha debido adaptarse a una nueva vida. “Por una parte, volví a ser dueña de mis tiempos y aprendí a tener mis momentos sola, que no significa que me guste la soledad, sino que valoro el llegar a mi casa y sentir esa tranquilidad, sin ruido, aunque sea un ratito. Disfruto y valoro esas cosas simples que antes no tenía”, expuso.
“Hoy no tengo tiempo para nada más que mis niños y mi papá. Me levanto a dejarlos al colegio y hay veces que vuelvo a las nueve de la noche a almorzar (…) hoy tengo la necesidad de estar con él (su padre), aunque pase a darle un beso cada día», agregó al respecto.
«Lo acompaño a sus quimioterapias, hablo con los doctores y veo todo lo que implica esta enfermedad”, sostuvo con relación al complejo momento familiar. En ese aspecto, Gallardo admitió sentirse «agotada física y emocionalmente», pero intenta ver el lado positivo de las cosas.
Finalmente, reveló que está trabajando junto a su ex esposo en un especial proyecto en conjunto. «Antes de mi quiebre matrimonial, le insistía a Mauricio que le diera la oportunidad a algo nuevo (…) Me hace muy feliz poder acompañarlo y que me haya elegido para ser parte de él, pero no puedo adelantar nada todavía”, explicó para concluir.