El viernes terminó la subrogancia de José Miguel Viñuela en la conducción del matinal “Mucho Gusto”. Desde el próximo lunes Luis Jara, felizmente recuperado de su operación a las cuerdas vocales, retomará su lugar. El periodista de la risa estentórea hizo una gran labor, logrando refrescar la pantalla y hasta subir el rating del programa.
Este reemplazo permitió resucitar a Viñuela como figura televisiva. Después de su opaco paso por TVN, donde fue la cara de fracasos televisivos como “Más que 2”, “¡Boom!” y “Un Minuto para Ganar”, solamente había hecho noticia por el complicado nacimiento de su hijo y por ser una de las víctimas de la estafa piramidal de Alberto Chang. Sin embargo, el conductor había logrado reinventarse en diversas actividades: como conductor de programas radiales; haciendo los café concerts “Ex Amigos” con su ex pareja María Luisa Godoy y “Despierta Chile, un matinal diferente», junto con Patricia Maldonado, Pamela Díaz y otros rostros; e inaugurando un emprendimiento en el rubro inmobiliario. Sin embargo, el bichito de la TV lo volvió a picar, y lo vimos teniendo una buena participación como panelista de “Fiebre de Viña” en Febrero pasado.
Viñuela tiene un nombre muy bien ganado: fue el conductor histórico de “Mekano”, programa que marcó una época en la TV chilena en la primera década del Siglo XXI, y semillero de muchos actuales rostros de TV y hasta de alcaldesas. Su participación en “Mucho Gusto”, el mismo programa desde donde salió de Mega hacia TVN, hacen pensar que todavía tiene mucho que dar y decir en TV. Muchos alcanzaron a plantearse la posibilidad de mantenerlo como titular y dejar a Lucho Jara comiendo pan con mantequilla en su casa. No sería la primera vez que un reemplazante que hace una buena labor termina desplazando al titular. Es recordado el caso de Margot Kahl, que en el primer año del “Buenos Días a Todos” reemplazó temporalmente a una embarazada Tati Penna, armó un trío dinámico de miedo con Felipe Camiroaga y Jorge Hevia, se ganó el cariño del público y terminó apoderándose del puesto al año siguiente y por la próxima década. Claro, en esta pasada no será posible, pues Viñuela ya tiene nueva pega: el programa “Vente Pa’ Acá” en Radio Candela.
En todo caso, este exitoso reemplazo deja abierta la puerta para que Viñuela tenga un lugar en la TV, aunque sea en un programa piola en un canal de cable. Después de tocar el cielo y el fondo, ha sido capaz de rehacerse y seguir de pie en otro rubro. Más allá de que nos guste o no como conductor o que soportemos o no sus particulares carcajadas, no hay que dar por muerto a José Miguel Viñuela en la TV.