Se ha convertido en un sello personal. El conductor de programas como «Mea Culpa» e «Irreversible» se ha caracterizado durante todos estos años por detener las escenas y aparecer repentinamente para oficiar como relator de la historia que vemos en pantalla. La pregunta es: ¿por qué?
En conversación con el portal de Canal 13, Carlos Pinto reveló que “en el tiempo en que nosotros hicimos Mea Culpa, el programa fue considerado demasiado fuerte para la televisión, incluso en horario nocturno. De modo que había que hacer algo para que a la gente no le imprimiera tanto miedo la visión del capítulo, teníamos que hacer algo para aligerar esa sensación de extrema gravedad y crueldad“.
“Decidimos que en el momento en que el personaje (de la historia) puede decidir o no cometer un crimen, era el momento en que yo debía aparecer para echarle agua al carbón o al asado para que no se quemara tanto”, agregó, señalando que “entonces, yo interrumpía. Estaba emocionante el capítulo, iba a pasar de todo y aparecía yo, como un balde de agua fría. Finalmente quedó un sello, uno que hemos repetido en Irreversible. La gente, en cierto modo, lo exigió, lo pidió. Ellos lo han pedido”.