Una de las cosas que caracterizar a Billie Eilish es su costumbre de usar ropa talla XXL. Al vestir prendas que no marcan su figura, la cantante ha buscado expresar que no quiere ser como persona y artista por su físico, y que la atención solo se centre en su trabajo. Sin embargo, esto no ha impedido que su cuerpo se haya convertido en una materia de frecuente debate.
Ahora las redes sociales nuevamente han estallado a raíz del tema, debido a una imagen captada por un paparazzi donde se aprecia a la joven de 18 años caminando en Los Angeles (California) vistiendo una apretada camiseta de tirantes y un short que dejan ver las formas y curvas de la cantante.
La fotografía, lamentablemente, provocó la aparición de mensajes ofensivos por parte de haters que, apelando al body-shaming (avergonzar a alguien por su cuerpo), convirtieron a Eilish en el foco de comentarios desagradables, bromas y memes haciendo referencia a que “está gorda”, “era una lástima” o se “había echado a perder”.
El cúmulo de ataques no dejó indiferente a la adolescente, quien respondió de una manera elegante, compartiendo un video en el cual ella ni siquiera aparece, pero que es un dardo directo hacia todos aquellos que la juzgan por su cuerpo.
Utilizando su cuenta en TikTok, subió un registro de la youtuber Chizi Duru titulado “¿Podemos normalizar todo tipo de cuerpos?”, en el cual anima a que la gente deje de pensar “que los cuerpos normales son anormales”, y a reflexionar que las imágenes de celebridades con figuras esculturales que tanto abundan en las redes sociales no corresponden a la realidad.
“No todo el mundo tiene un trasero gigante a sus espaldas, ¿ok? Los rollos son normales. Son normales. Los pechos se caen… Especialmente después de amamantar. ¡Instagram no es real!”, es parte del mensaje enviado por Chizi Duru en el video y que la artista viralizó aquí:
https://vm.tiktok.com/ZSxAF7Ry/
Cabe recordar que Billie Eilish antes ya se ha referido indirectamente al tema. En letra de la canción “Not my responsability”, la cantante dice: “Nada de lo que hago pasa desapercibido. Si me visto con ropa cómoda, no soy una mujer. Si me deshago de las capas de ropa, soy una zorra. ¿Te gustaría que fuera más pequeña? ¿Más débil? ¿Más flexible? ¿Te gustaría que me estuviera callada?”.