Dieciséis años tenía Marcela Vacarezza cuando vivió una situación de amenaza, que en realidad, era un amedrentamiento para su padre, el médico Ricardo Vacarezza, durante el gobierno militar.
“Mi papá fue el primer presidente del Colegio Médico regional de Santiago y después presidente del Colegio Médico general. Fue el primero que hizo un paro de médicos en todo Chile, fue muy bullado”, contó la sicóloga en el último programa “Podemos Hablar” de Chilevisión.
“La gente me dice facha, pinochetista, y es lo más contrario que hay, es parte de los prejuicios”, aclaró, agregando que al parecer las acciones emprendidas por su padre “no le parecieron al caballero”. “Él (su padre) es muy utópico, siempre peleó por la salud en Chile y esa fue su bandera de lucha”, explicó a Julián Elfenbein y a los invitados al estelar, que escuchaban en silencio su narración.
“Llamaban por teléfono a la casa y decían ‘¿Hablo con Marcelita? Y yo contestaba que sí, y ellos decían, ‘dígale a su papá que se quede callado, que no siga tonteando porque su carita tan bonita le va durar poquito’”, detalló la comunicadora, agregando que también había un auto afuera de su casa, con los vidrios polarizados y sin patente, vigilando todo el día.
Reconoce que teniendo la edad que tenía en aquellos años, lo que estaba ocurriendo le parecía de locura. “Todo era bastante siniestro (…) Al final, nos tenían prohibido contestar el teléfono. Como papás los supieron manejar súper bien (…) Me dieron la seguridad de que no iba a pasar nada. Pero no podía vivir tranquila, me tenían que ir a dejar a un lado, buscar a otro, (preocupados) si llegué o no”.
A pesar de la tensa situación, Marcela Vacarezza dice que hoy valora que su padre siguiera peleando por sus ideales. “Era lo que había que hacer no más”, concluye.