La noche del martes, el ex panelista de «Mucho Gusto» fue el invitado al programa conducido por Sergio Lagos en Canal 13, «Juego Textual». Ahí, el ex chico «Yingo» se refirió a cómo se toma los comentarios de la gente que critica sus ostentosas publicaciones.
Mientras contaba cómo le había pedido matrimonio a su novia María Francisca Virgilio en París, momento que luego publicó en sus redes sociales, se le preguntó al comunicador si este tipo de gestos ostentosos pueden ser la causa de las “funas”.
Ante la consulta, Lucero respondió que “esto es lo que yo siempre deseé. Lo que piense el resto me importa una r… Eso me lo gané, no robé a nadie ni pasé a llevar al del lado, y las personas que deciden seguirme en redes sociales son las personas que quieren verlo. Nadie está obligado a hacerlo, hay un botón que dice ‘dejar de seguir’, y así es como debería funcionar la democracia digital”.
De igual forma, agregó que no siente que sea justo considerarlo un símbolo de la desigualdad y del privilegio, porque él precisamente viene desde muy abajo. “Yo hasta los 19 años dormí en una mediagua, en una casa forrada de cartón. Soy parte de ese sistema, estudié en un liceo y fui el primero en ir a la universidad de mi familia. Cuando yo vivía en una realidad precaria y veía estas realidades distintas a la mía, no hacía más que incentivarme y motivarme”, contó.
Ante esta situación, Karol también reflexionó sobre la gente que interactúa en las redes sociales: “No se condicen con la realidad. En la calle tres o cuatro veces deben haberme parado para decirme algo, el resto del tiempo recibo sólo saludos y buena onda, mientras que he sido millones de veces trending topic en Twitter. He comprobado que nunca se perdió lo que construí durante 15 años”, señaló.