Claramente, Kanye West no se resigna a estar separado de Kim Kardashian y está tratando de recomponer su relación con la socialité estadounidense, quien solicitó el divorcio en febrero de este año luego de siete años de matrimonio.
En ese período ella debió soportar las continuas excentricidades de su marido, entre ellas una candidatura presidencial en 2020 con la que el cantante pretendió enfrentarse a Donald Trump y Joe Biden.
Pero el hombre es persistente si es que se trata de salvar la relación. Así lo demostró durante un concierto benéfico llamado «Free Larry Hoover» organizado por él y otro rapero, Drake, con el propósito de crear conciencia acerca de una reforma al sistema penitenciario de Estados Unidos que permita a los exconvictos integrarse a la vida en sociedad.
En medio de su interpretación del tema “Runaway”, West de improviso le pidió a Kardashian, que todavía es su esposa, que regresara con él.
Hasta ahora la figura televisiva y empresaria no ha reaccionado a las palabras que su ex le dirigió públicamente en el evento -que fue transmitido en vivo por Amazon Prime Video-, aunque ya existe el precedente de la indiferencia que ha mostrado en el pasado ante las muestras de cariño del cantante.