El sorpresivo matrimonio civil de Justin Bieber con la modelo Hailey Baldwin en septiembre pasado no ha sido motivo suficiente para llevar tranquilidad al cantante canadiense, quien, según la revista People, decidió internarse para superar un rebelde cuadro depresivo.
Según el reportaje, Bieber está muy enfocado en sentar cabeza y resolver sus problemas cuanto antes. «Sus emociones son muy viscerales, pero él sabe que este tratamiento, aunque doloroso, es lo que necesita para poder seguir adelante en su vida», señaló una fuente anónima al medio estadounidense. La publicación asegura que la terapia seguida por el astro se compone tanto de un tratamiento médico como de una orientación espiritual llevada a cabo por pastores.
La gran incógnita es qué tiene tan deprimido a Justin Bieber. Las fuentes consultadas por People afirman que la situación no se relaciona con su boda, porque incluso Hailey Baldwin habría instigado a la estrella pop para buscar ayuda psiquiátrica.
La enorme fama del cantante siempre ha afectado su salud mental; no obstante, el reportaje cita que en su entorno afirman que «Justin todavía tiene cosas sin resolver del pasado», lo que gatilló una ola de especulaciones que incluso vinculan la crisis depresiva con Selena Gómez, ex del cantante que muchos consideran como su verdadero gran amor y que también debió internarse por una fuerte crisis emocional sufrida pocas semanas después del casamiento de Bieber.
«Los problemas de Justin no tienen nada que ver con Hailey, él es muy feliz con su reciente matrimonio», dicen, sin embargo, desde su entorno.