La cantante de la tercera generación del programa de talentos conducido por Álvaro Escobar conversó con Fotech.cl sobre su estadía en el espacio del canal estatal y relató su experiencia como representante de la comunidad LGBTIQ+ en nuestro país.
¿Cómo ha sido vivir esta nueva experiencia?
Ha sido como un tornado, dio vuelta mi vida, la agitó en un 100%. Yo era una persona muy reservada y de un día para otro le mostré mi vida a todo Chile, incluyendo gente que está fuera y que nos sigue por la señal online. Es cuático cuando te das cuenta que tu vida personal ya no está ahí, porque la gente está al pendiente de lo que estás haciendo y lo que vas a hacer. Esta nueva experiencia ha traído muchas cosas buenas, pero también te cambia mucho como ser humano.
¿Estabas preparada para la exigencia que requiere este nuevo desafío?
Tengo sentimientos encontrados con esta pregunta, porque la verdad es que no estaba preparada para la exigencia que requería programa, pero sin embargo, estaba consciente de sí iba a ser difícil, que iba a ser duro, que nos iba a costar, porque al final estamos hablando de competencia, donde obviamente unos son más fuertes que otros, entonces yo estaba consciente de que iba a ser duro y que me iba a costar.
¿Qué fue principalmente lo que te motivó a postular al programa?
La motivación que tuve para postular al programa «Rojo» fue el estar perdiendo la fe en mi misma, el no saber hasta dónde podía llegar, fue como una competencia conmigo misma donde me dije: ‘a ver, ¿hasta dónde llego?’, esa fue mi motivación. Fue la primera vez que postulaba para un programa de talentos.
Pudimos observar que contaste tu historia íntima en el programa, ¿Sientes que representas de alguna forma a la comunidad LGBTIQ+ en el espacio?
De alguna manera si siento que estoy representando a la comunidad LQBTIQ+ por el hecho de que mucha, mucha, mucha gente de la comunidad me ha escrito felicitándome por donde llegué, felicitándome por mi historia, felicitándome porque fui valiente en mostrarlo por las pantallas, que es peligroso, entonces mucha gente me ha dicho: ‘oye, te admiro por la valentía que tuviste a los 14 años de decirle a tu familia’, porque mucha gente se siente identificada con el hecho de que alguien que sea joven, que esté en un programa de talentos, compitiendo, que sea homosexual y que haya mostrado su vida tal cual era. Así que sí, en parte me siento con ese sentimiento de representarnos.
Llevamos pocas semanas de «Rojo» pero, ¿Has vivido el reconocimiento en la calle?
Sí, ya lo estoy viviendo; en la calle, en la micro, en el metro, en el supermercado, en el mall, ya me ha pasado en todos esos lugares y es muy bacán, es algo tan rico, se siente tan genial. Yo siempre quise ser cantante, desde muy chica y soñaba con poder tomarme fotos con la gente, que se me acercaran y me dijeran: ‘oye, tómate una foto conmigo’ o que me dijeran ‘oye, tú eres tal persona, eres cantante’, que me identificaran, siempre soñé con eso, que la gente te admirara, eso se siente genial, esto para mi es realmente un sueño, siento mucha felicidad y orgullo por poder estar logrando lo que tanto he querido durante tantos años.
Para finalizar, ¿Cuáles podrías decir que han sido tu mejor y peor momento dentro de esta experiencia?
El mejor momento de mi estadía en «Rojo» fue llegar, sólo el llegar al programa, ese ha sido mi mejor momento, el lograrlo y poder demostrar quién soy realmente. Y el peor fue borrarme completamente en el escenario, sin saber qué hacer.