El director ejecutivo de TVN, Jaime de Aguirre, debió disculparse públicamente por la cobertura que el canal estatal brindó al caso de las torturas sufridas a manos de otros convictos, que adoptaron un rol de “justicieros”, por los reos de nacionalidad ecuatoriana Diego Tabango y Olguer Otavalo en la cárcel Santiago Uno.
Este hecho mereció un reportaje de “24 Horas”, que en su edición del jueves 21 de junio se preguntaba si “deben tener los reos derechos básicos», planteamiento que recibió un amplio repudio.
«Lamento profundamente el desacierto cometido”, dijo el máximo ejecutivo de la señal en una carta al director publicada hoy por El Mercurio, donde indicó que se adoptaron “las medidas internas correspondientes”, y reafirmó el compromiso de la televisión pública con los valores de la democracia, los derechos humanos y el respeto al Estado de Derecho.
El ejecutivo agrega que el “desafortunado texto”, no reflejaba el espíritu ni el contexto con los que se realizó la nota pauta, lo que derivó en un proceso de cuestionamiento interno, “de acuerdo con los estándares y protocolos que rigen en nuestro medio de comunicación, cuyo motor esencial es el rigor periodístico», según señaló.
Cabe recordar que los afectados por los maltratos han sido imputados como autores de la muerte de Margarita Ancacoy, la auxiliar de la Universidad de Chile que fue asesinada a golpes en la esquina de calle República con Domeyko.
La misiva de De Aguirre también fue una respuesta a la carta de la abogada y locutora radial Paola Berlin difundida por el mismo diario el domingo 24, en la que afirmó: «Que nuestro canal de televisión pública se permita sugerir -pregunta mediante- que los presos podrían no tener derechos básicos, debiera causar conmoción nacional».