Desde que Benjamín Vicuña informó al mundo el viernes en la mañana que se había separado de China Suárez, los medios argentinos han dedicado nota tras nota para referirse a la situación, convertida en el principal foco de la atención farandulera trasandina.
Y entre todo lo que se ha escrito al respecto, uno de los temas que más se destacaba era que la ruptura había sido en buenos términos y para priorizar el bienestar de sus hijos. También corría la versión de que fue el actor chileno quien tomó la decisión de acabar con la relación. Así se afirmó en “Los ángeles de la mañana”, un programa matutino dedicado a las celebridades.
Esa afirmación choca con otra que responsabiliza a la China Suárez como quien tomó la iniciativa de poner fin a la pareja, e incluso se ha hablado de que la actriz estaría envuelta en un romance. Ella estos días ha optado por mantenerse en silencio, dedicándose a compartir imágenes de su nueva casa y los avances para ponerla a punto.
Vicuña, por su parte, no ha vuelto a tocar la situación. Sin embargo, parte de su círculo íntimo reveló anónimamente los sentimientos del artista luego de escribir y compartir el mensaje donde anunció la ruptura.
“Está destrozado”, le habría confiado una de sus amistades a la periodista Débora D’Amato, panelista del programa de América TV “A la tarde”.
Haciéndose eco de ello, medios como TN han informado que el galán chileno se encuentra triste y viviendo solo en el departamento que posee en el barrio bonaerense de Palermo.
Y dentro de todas las versiones que van y vienen acerca del quiebre, se sigue especulando con las causas, una de las cuales sería la gran diferencia de personalidades de la expareja.
“Ella no tiene la prolijidad que Benjamín pretende en el día a día. Tiene que ver con lo cotidiano, con la organización, con la familia tradicional. Ella es un desbole (despelote) y él es muy estructurado”, se sostuvo en “Los ángeles de la mañana”.