En la acción judicial, el ex tenista alude a declaraciones entregadas por el ex conductor de «Primer Plano» en los últimos meses.
Marcelo Ríos sorprendió con un nuevo golpe en contra de Jordi Castell, luego de que presentara una querella criminal por el delito de injurias graves.
En el detalle del documento, disponible en el Poder Judicial, la defensa de Ríos alude a distintas frases realizadas por Castell en febrero pasado en el programa «Vamo a Calmarno».
Allí, el fotógrafo señaló que «si yo te cuento lo que hace en South Beach cada vez que va a visitar a un travesti que es dealer de crystal meth, en South Beach, en Washington Avenue…».
«Si les cuento la razón por la que su hija, su hija mayor, la que tuvo con Giuliana Sotela, la Constanza, estuvo enojada con él un año y medio porque se metió a su teléfono, por equivocación, se metió al teléfono de su papá, y encontró cosas que tenían mucho que ver con… mujeres que no eran mujeres», continuó.
La defensa de Marcelo Ríos argumentó que las declaraciones de Jordi Castell «generaron una serie de comentarios en la opinión pública y en los medios de prensa», pero que en ese entonces el ex tenista no quiso presentar acciones legales por «el desgaste y exposición que podía implicar para él -y principalmente- para su familia denunciar ante la justicia este tipo de hechos».
Pero los hechos volvieron a repetirse, esta vez a fines de septiembre en una transmisión junto a Pamela Díaz y Jean Philippe Cretton. Allí, Castell se refirió a los comentarios que Ríos hizo cuando anunció la muerte de su mascota.
«Le voy a responder en algún momento», dijo y agregó que «él sabe que yo sé cosas de él» y «yo tengo antecedentes de todos sus expedientes, de todas las cosas que hace, a quién visita, a quién no, por qué visita a esa, por qué va a la otra».
«Este señor lo que está pidiendo a gritos es que toda esa información, que yo tengo, que lamentablemente hay expedientes, hay informes, hay cosas que la prensa no, yo no sé si, no ha tenido acceso, o no ha querido escarbar, pero son cosas bastante escandalosas, ehh, ilegales, ehh que además se compran silencios con delitos graves, ehh donde están involucradas eh la vida de ciertas personas…», insistió.
La querella consigna que el demandado busca «denostar públicamente la imagen y honra de nuestro representado, al imputarle la comisión de actos ilegales, y la participación en delitos graves -que incluso involucrarían la vida de terceros- sin entregar ningún antecedente concreto sobre estas acusaciones». Además, con la repercusión que generó, llevó a que tuviera «un nivel de exposición pública que ha afectado gravemente la honra de nuestro representado».
Marcelo Ríos busca que Jordi Castell sea declarado culpable y sea condenado a tres años de cárcel y el pago de 15 UTM.