Una de las grandes interrogante que dejó el final de la teleserie nocturna de Mega fue el destino que tuvo Julieta, rol que interpretó la actriz, quien por estos días se encuentra grabando «Pacto de Sangre» en Canal 13.
Ante esto, y en entrevista con BioBioChile, Ignacia Baeza demostró su inconformidad con el desenlace que tuvo su personaje en «Perdona Nuestros Pecaodos», asegurando que «no tuve final».
“Yo lo adjudico y lo trato de entender como que en el fondo al guionista se le fue un poco en collera porque eran demasiados personajes y habían historias potentes e importantes que tenían que tener un final y que el público las exigía”, dijo.
Para ella, “mi personaje que prometía mucho cuando entró, cuando a mí me ofrecieron la historia era un personaje que iba a ser más grande de lo que fue”, agregando que “creo que se les fue no más (…) en el fondo Julieta pasó colada entremedio igual que mi hermana (Lucrecia, interpretada por María José Prieto)”.
“Ahí hay un error. Yo debería haber tenido un cierre, por último que en el texto dijeran se fue al sur y que volvió a la enfermería. Pero en el fondo no tuvo ese cierre. Fue triste, fue fome. Igual fui parte (de la teleserie) y no fue un personaje chico, merecía un cierre”, sostuvo.
En esa misma línea, sostuvo: “La tiraron para la locura, entonces hubiera sido entretenido ver cómo esta mina enloquece de amor y le empieza hacer la vida imposible a María Elsa, o se obsesionaba con el cura… creo que pintaba para allá, pero no dio el tiempo. Entrar en las segundas temporadas a la mitad de algo, es difícil que se sostenga”.
“Le hubiese dado un final feliz porque en el fondo Julieta era una buena mujer, una mujer tranquila bondadosa, que cuidó al padre, que cuidaba a los enfermos. Entonces yo creo que si bien no resultó con el padre, sí podría haber hecho link con otro personaje y se hubiera dado a entender que vivieron felices. La hubiese cerrado bien”, finalizó.