Hace algunas semanas, el artista de la Cuarta Región se encuentra promocionando su primer trabajo de estudio, un disco en el que repasa conmovedoras experiencias que han cimentado un camino no exento de adversidades, pero sí muy fértil y enriquecedor en términos profesionales. En entrevista con este medio, presenta sus credenciales.
Desde muy pequeño, incluso antes de los 10 años, Jeo se sintió fuertemente inspirado por la composición, lo que fue desarrollando en una infancia muy prolífica en la que acumuló decenas de poemas. Este primer acercamiento a lo artístico, marcaría profundamente al hombre oriundo de la Cuarta Región, quien actualmente instalado en Santiago, busca abrirse paso en la escena musical local. El primer paso, ya lo dio hace unas semanas, cuando presentó su primer disco “Hijos del rigor”, en la SCD de Plaza Egaña, una experiencia muy enriquecedora para él y su equipo creativo. Sobre sus definiciones musicales, el camino que recorre y otros temas, habla con nosotros.
¿Cómo has vivido este proceso de aterrizar en la escena nacional musical?
Ha sido un proceso que, afortunadamente, se ha dado de manera natural. Ha sido todo pensado paso a paso, con objetivos claros. En un inicio, fue retomar la musicalidad tanto del punto de vista de los instrumentos musicales, como también empezar a tomar clases de canto formales. En ese proceso, comencé a entrar en contacto con toda la escena musical, un espacio donde es muy lindo ver la cantidad de talentos que están en fases muy parecidas a la mía y/o muy avanzados. Por lo que veo de manera positiva, cómo se están preparando y están poniendo todo por mostrar lo mejor de cada agrupación. Es cierto que la escena local, también es incierta en cierto sentido, sobre todo para los proyectos autogestionados, pero tengo la convicción que si se hace de manera programada y estratégica, es posible poder tener bonitos resultados paso a paso.
¿Con qué dificultades te has encontrado en tu cruzada por profesionalizar tu carrera y por insertarte en el ambiente musical nacional?
Las dificultades siempre existen, en este caso como Jeo es un proyecto
autogestionado, se debe disponer de recursos mínimos para poder avanzar, como la producción de las canciones, hasta la forma de difundirlas para que esta pueda darse a conocer en el nicho que le corresponde, de acuerdo a su estilo. Existen pocas plataformas para poder mostrarse por supuesto sin tener que pagar para poder tocar las canciones. Pero, en general, creo que si se logra encontrar un objetivo claro y estratégico, esto va caminando en la misma proporción en que se va planeando cada paso que se da. Estoy seguro de que si cada día voy mejorando en la parte de creación del concepto, lo que se quiere transmitir al público (que en este caso son sentimientos originados de situaciones de la vida cotidiana) y en la musical, es posible enfrentar todas las dificultades que se presentan en la carrera.
¿Sientes que es muy complejo hacer música en Chile?
Siento que la complejidad en Chile puede estar dada porque nos encontramos muy alejados de las grandes potencias musicales y no existe una plataforma que pueda facilitar todo, pero al mismo tiempo, creo que esta complejidad otorga la posibilidad de imprimirle un grado de esfuerzo adicional al trabajo que, finalmente, se nota a la hora de ver los resultados. La complejidad puede operar como una herramienta de ayuda que me permite superarme y aprender de las experiencias que se viven en el camino. Me siento muy contento de ver cómo vamos mejorando en cada presentación y eso se nota a la hora de analizar cada una de ellas.
¿Cuál es la oferta de Jeo para los melómanos?
Un sonido fresco, potente y con mucho sentimiento. El hecho de haber comenzado mi carrera luego de vivir momentos fuertes que me hicieron replantear toda mi vida, hace que el mensaje de cada canción sea que la soledad a veces está ahí por algo positivo que nunca imaginaste, o también que no importa qué tan adverso sea el momento que estás viviendo si pones toda la pasión para avanzar, porque al final del camino se vuelve en un regalo. En mi primer disco, “Hijos del rigor”, que estoy lanzando ahora, la convocatoria es a disfrutar el tránsito del camino de la vida, aprendiendo de las situaciones y emociones. Es verdad que uno vive momentos muy oscuros donde no se ve una salida, mi música muestra la luz en el lugar y el momento donde todas las luces desaparecen.
¿Qué aspectos distintivos tiene Jeo respecto del resto de los artistas?
Sería muy autorreferente ponerme a describir mis cualidades en comparación con otros artistas, pero creo que expresar los sentimientos y emociones de manera genuina y sin disfraces, además de creer que todo se construye en base al esfuerzo adicional que cada uno pone en los sueños, es un aspecto muy bonito que he descubierto un tiempo antes de componer las canciones del disco y que hacen que todo tome color y sentido. Por supuesto, mi deseo más grande es compartirlo con los demás.
¿Cuáles son tus referentes musicales?
Me gusta mucho la música británica antigua y la movida actual. Su calidad musical y la manera de transmitir. En Latinoamérica, la influencia de Gustavo Cerati creo que con sus letras y forma de componer, llenaron un espacio muy grande en los corazones de miles de personas. También, actualmente, Zoe en México tiene una propuesta muy interesante que ha logrado conmover con sus letras. En Chile, lo que hizo La Ley en su momento me llegó mucho en una etapa de mi vida, aunque en general he pasado por muchos estilos, ya que lo que me gusta es la música y la forma en que el artista logra transmitir.