El periodista conversó con Fotech.cl sobre lo que fue el año pasado en materia laboral realizando su propia evaluación, y proyectó lo que se viene para este 2022 con sus nuevos proyectos, además del programa de viajes «Chile Conectado».
Tuviste un 2021 bien movido, con programas nuevos, ¿cómo se viene este 2022?
Se viene movido, con más viajes, lo que me tiene muy contento porque han sido bonitos reencuentros. Nosotros partimos viajando en plena pandemia, así que ha sido bien bonito el hecho de poder reencontrarse y «Chile Conectado» también ha sido como ese nexo de quienes no han tenido la oportunidad de viajar o salir de su casa de sentirse en lugares que ya han visitado y los que no. También cumplimos con hartos hitos, llegamos a lugares donde la última vez que la televisión había ido fue en los años 80, en una isla bien pequeñita de Chiloé y eso para la gente de allá era un evento gigante, era maravilloso porque al fin se iban a ver en la tele. A veces uno está tan acostumbrado a ver las ciudades más conocidas o emblemáticas del país, ellos no se habían visto de los años 80s y ahora se pudieron ver, en plena pandemia, era algo casi anormal. Va a ser muy bonito si se mantiene y además se viene algo en vivo muy interesante, con gente a quien yo adoro y amo.
Cuéntame más del nuevo matinal, «Buen Finde en TVN»…
Para mí trabajar con Karen (Doggenweiler) es un lujo. Es un proyecto muy bonito de sábado, que vamos a estar entre amigos. Tengo 10 años de amistad con Karen, nos amamos y adoramos, para los dos es un lujo, éramos lo que estábamos pidiendo hace tanto y al fin se dio en algo constante. Va a ser una linda junta de sábado tanto para nosotros en el canal como para quienes nos estén viendo. Además, es en vivo y eso le da un vértigo rico.
¿Qué pasaría si a este matinal le va bien y te ofrecen o les ofrecen hacerlo de lunes a viernes?
¡Vamos! Yo voy a la guerra siempre, aunque no tenga la mejor arma (risas).
Este matinal te trae de regreso al estudio después de tanto viaje, ¿no te dará el síndrome de ‘Olguita Marina’?
Me da el ‘Olguita Marina’, pero echaba tanto de menos estar en vivo. Me da mucho vértigo y adrenalina, lo encuentro difícil también y eso me encanta. Alucino estando en vivo, se me prende una energía que de repente no la tengo, pero no sé de dónde me sale. Me encanta.
¿Crees que este 2022 logre igualar o sobrepasar tus logros del año recién pasado?
Espero que sea mucho mejor. La verdad es que peco poco de ansioso, pero sí me gusta avanzar y esas son mis pretensiones. Quiero seguir avanzando, ojalá poder hacer cosas que no son de mi comodidad, ojalá sentirme nervioso cada vez que salga al aire y espero que eso se venga este 2022.
Hace mucho tiempo que TVN no hacía un lanzamiento como éste, ya no hay pérdidas en sus ingresos. ¿Sientes que es el renacimiento del canal público?
Sí, y también lo noto. Tengo la suerte de trabajar en un programa que me permite ver no solo la calle de Santiago, si no que la calle de norte a sur, pasando por el centro y llegando a los más extremos. Sí, nos echaban de menos y nos piden más. Eso es más pega, pero también más responsabilidad y a eso vamos, por eso estamos acá.
Gino, en tus últimos reporteos te hemos visto con algunos fail, ¿te pasan muchos chascarros en tu día a día?
Algo tengo (risas). Probablemente acá me voy a caer, no sé. Soy bien acontecido, es algo de mi vida diaria, no es algo de la tele. Siempre me pasan tonteras y yo también, cuando me pasan, las aprovecho para reírme de mi igual. Al final lo importante es reírnos y punto.