A solo dos meses de la esperada edición de Viña 2025, el comediante George Harris se ha convertido en el foco de una intensa controversia que podría afectar su participación en el festival. Las redes sociales han estallado tras las opiniones del humorista en contra de Salvador Allende y el presidente Gabriel Boric, poniendo en jaque su show en la Quinta Vergara.
Desde la semana pasada, la polémica se intensificó cuando algunos usuarios descubrieron antiguos tuits de Harris con contenido político que no han caído bien en el público chileno. Esto ha llevado a varios a exigir su exclusión del evento, argumentando que sus comentarios podrían ser ofensivos para un sector de la audiencia.
Además de lo anterior, ha circulado en las plataformas digitales una rutina de stand-up del comediante, donde se refiere al triunfo de Gabriel Boric en las elecciones presidenciales de 2021, afirmando que «no sirve para nada».
Amenazas de muerte
En el programa «¡Hay que decirlo!», se reportó que el humorista se reunió con los organizadores de Viña 2025 para discutir su situación. En el encuentro virtual del 3 de diciembre, Harris agradeció la oportunidad de presentarse y reveló que ha recibido amenazas de muerte por sus opiniones. «Es una angustia muy grande», comentó, añadiendo que decidió contactar a amigos en Chile para entender mejor la situación.
El humorista confesó que nunca pensó que su estilo de comedia lo llevaría a recibir este tipo de intimidaciones, aclarando que no enfocaba sus rutinas en la política, pero al escuchar sobre la izquierda, «corría», porque la consideraba responsable de la «decadencia» de su país, Venezuela.
A pesar de la presión, los ejecutivos le brindaron palabras de aliento y lo motivaron a seguir adelante con su participación en Viña 2025. De hecho las entradas están agotadas para el día en que se presentará.
«Ese dolor no lo conozco»
En este contexto, el panelista, Michael Roldán, desde el programa «Only Fama», se comunicó con George Harris para esclarecer su postura actual sobre sus declaraciones.
La figura radicada en Miami argumentó que dice cosas y luego reflexiona y se arrepiente, que no tendría que haberse referido a Salvador Allende, que no ha vivido el dolor que padeció Chile y que hizo un mea culpa, lo que lo llevo a lamentar su forma de actuar.