El actor, quien debutó en teleseries en «El Regreso», será parte de «Caleta del Sol», la próxima producción vespertina de TVN, donde interpretará al inocente Chungungo, una especie de Lazarillo de Tormes, que se paseará por la caleta con su inseparable llama de nombre «Lupita». Conversamos con él sobre este nuevo desafío en su carrera:
Cuéntanos un poco de Darío, tu personaje en «Caleta del Sol»…
Darío «Chungungo» Jerez, es un anti-héroe. Así como en el siglo de oro español se escribió «El Lazarillo de Tormes» y se instauró en las novelas picarescas y en la literatura mundial a un joven protagonista que sólo intenta sobrevivir al día a día y es por sobre todo empático, cómico, hambriento y carente de moral, no porque sea un rebelde que quiera ir en contra de las morales establecidas, sino porque es un hombre que sobrevive y no tiene cabida ni reales oportunidades. El gran valor de este personaje arquetípico lo ha llevado a ser parte importantísima del arte y gracias a su calidad de personaje arquetípico nos permite encontrarlo en la vida, y por supuesto, en «Caleta del Sol», bajo el apodo de Chungungo. Conocemos millones de «Lazarillos» en la literatura y en el teatro, televisión, cine: el Chavo del Ocho, Tom Sawyer y el gran personaje conocido y querido por todos nosotros, Juan del Burro, interpretado magistralmente por Pablo Schwarz. Chungunguito es flojo, regalón, tonto como puerta, pero de buen corazón y por sobretodo inocente, por lo que se involucrará en muchos problemas, que siempre desde la comedia, nos entretendrá con sus astutas mentiras y enredos.
¿Con quiénes se relaciona en la teleserie?
El Chungungo es huérfano de madre y se queda viviendo con Lidia (Tatiana Molina), su tía, y con su hermanita (Silvana Salgueiro). Su padre, Humberto, lleno de deudas tras la enfermedad mortal de su esposa, se va a la mina a trabajar para poder mandar plata para sus hijos y pagar las deudas. Esto deja a Chungungo sin Dios ni ley en la caleta. Por su necesidad de sobrevivencia estará dispuesto a obedecer a quien le quiera dar plata y comida, sin importar moral ni ideologías. Es un personaje que une muchos mundos, ya que se pasea por todos lados. Querido y odiado por todos, Chungungo es parte importante de la caleta, aunque pertenezca a el nivel más bajo en cuanto a las jerarquías. Estará acompañado de una mascota que es lo único que tiene heredado de su madre: Lupita. Es su amiga y cómplice de todas sus acciones. La ama más que nada en el mundo ya que es lo único que le queda de su madre.
¿Cómo ha sido tener una llama como compañero de trabajo?
Es lo mejor que me ha pasado en este proyecto, junto con volver a trabajar con Macarena Teke, a quien amo jajajaja… Lupita es por lejos el mejor actor de la teleserie… lo entiende todo y conmigo se porta un siete. Estamos profundamente enamorados jajaja… es tremendamente paciente, repite mil veces las escenas y deja que yo la lleve para todos lados, porque cuesta, no se da con todos. Chubaca, su nombre real, es un espíritu libre y al igual que Chungungo es muy hambriento.
¿Alguna anécdota que nos puedas contar?
El primer día de grabación en Chañaral de Aceituno yo llegué con cuarenta de fiebre y la verdad es que ni me acuerdo lo que grabé ese día, estaba realmente mal. Estaba enfermo porque en ese tiempo estaba con gira de «Mercury, la Leyenda» y además con la temporada estable en Santiago… Bueno la historia es que llegué y me presentaron a Chubaca. Yo le tomé la cara, la miré a los ojos y con toda la intensidad del mundo le dije: «¡Escúchame! !Estoy muy enfermo y necesito que me ayudes!. Yo soy y seré tu compañero de trabajo». Después le di una zanahoria. Partimos grabando la primera escena y me mordió un dedo jajajajaja. Desde ese momento entendí que Chubaca sería quien mandaría y yo tendría que hacerle caso en todo. Este es el mayor desafío como actor, ya que tengo que: primero que nada obedecer a Lupita, después mantener el personaje, recordar el texto y pararme bien para las cámaras, para que yo y ella nos veamos. en fin un montón de información que hace que la actuación tenga un montón de vértigo.
¿Has visto algo de «Pituca Sin Lucas» y «Valió La Pena», la competencia de tu teleserie? ¿Qué te han parecido?
La verdad es que no he visto casi nada, pero conozco por amistad y trabajo de manera muy cercana a muchos actores, actrices y equipos de producción de esas teleseries y la verdad es que espero que sean un éxito… No más que nosotros jejeje, pero que la gente las siga y que sean de calidad. Si a todos nos va bien, eso me conviene a mí y a todos los actores, ya que se mantienen mas lugares de trabajo y se amplia la demanda…
¿Qué se siente participar en esta gran guerra de teleseries vespertinas que se viene?
La «guerra de las teleseries» me parece que es algo muy entretenido, me genera ganas de que partan y ver qué pasa. Pero la verdad es que, es una guerra que se escapa mucho de mi trabajo, ya que la real «guerra de las teleseries» la viven los que ponen las lucas, los directores de las áreas, la gente encargada de que la teleserie venda lo que tenga que vender. Mi «guerra de las teleseries» tiene que ver con hacer muy bien mi trabajo y ser el mejor en mi continuidad, llegar muy bien estudiado, ser puntual y por sobretodo plantear un punto de vista con mi trabajo. Eso es lo que más me motiva de trabajar en televisión, ya que es que es una plataforma muy masiva en donde puedo imponer temas de conversación por medio de algo tan entretenido como una teleserie. En mi trabajo en «El Regreso», por ejemplo, me puse la meta de hablar sobre la discriminación y el prejuicio. Y durante toda la teleserie enfoqué las escenas y mis relación hacia esa problemática. Y la verdad, es que me dio muchas satisfacciones artísticas e ideológicas, me dejó muy tranquilo ver que la gente reconocía esos conceptos y temáticas en el Miguelo. En el Chungungo me propuse hablar sobre la conciencia. Chungungo pasará de ser un animal inconsciente a entender que sus actos tienen repercusiones y por lo tanto a enfrentarse a esa contradicción y optar por alguna moral o ideología. Para hacer esto tengo mi propia continuidad y re-escribo todas mi escenas para re-enfocarlas. Siempre con el permiso del gran guionista Carlos Oporto y nuestro gran director Claudio López de Lerida.
¿Cómo invitarías al público a ver «Caleta del Sol»?
Queridísimos seguidores de Fotech, los invito a ustedes, que son sin duda los más entendidos y expertos en el ámbito de las teleseries, a que vean «Caleta del Sol», sin duda se encontrarán con muchas cosas que les vana a gustar. Es una teleserie en donde la caleta y su gente son los reales protagonistas de la historia, historia contada con mucho humor y sencillez. Es una teleserie que tiene un esfuerzo de producción ¡IMPACTANTE!. con un gran equipo de profesionales, grandes actores y hermosos paisajes. En lo personal, agradezco el esfuerzo de darle al área dramática de TVN una teleserie de muchísima calidad en todas sus aristas. ¡NO MÁS CARTONES! ¡Imperdible «Caleta del Sol»!