Luego de que hace solo algunos días la actriz asegurara a través de Twitter que la protagonista de la serie musical hiciera «un infierno en vida» su trabajo en la sexta y última temporada de la ficción, en esta oportunidad entregó nuevos antecedentes de lo ocurrido en una entrevista con revista Variety.
Allí, Samantha Ware detalló episodios claros de los malos tratos que recibió por parte de Lea Michele cuando se conocieron en el set de «Glee». “Sabía desde el primer día cuando intenté presentarme. No hubo nada gradual al respecto. Tan pronto como decidió que no le caía bien, fue muy evidente”, comenzó diciendo.
La artista recordó que “fue después de mi primera actuación cuando comenzó el tratamiento silencioso, las miradas, los comentarios en voz baja y la extraña agresividad pasiva».
«Cuando estás filmando una escena, a veces la cámara está sobre ti y otras no (…) yo estaba tonteando cuando la cámara no estaba sobre mí, y ella (Lea) lo tomó como una falta de respeto hacia ella», explicó Ware.
En ese momento, según continuó, «esperó hasta que terminó la escena y se detuvo en medio del escenario e hizo un gesto y dijo ‘Ven aquí ahora mismo’, yo dije ‘no’ y fue entonces cuando decidió amenazar mi trabajo y dijo que llamaría a Ryan Murphy para que me despidiera. Fue aterrador. Pasé la semana esperando un email para abandonar los últimos tres episodios”.
Samantha aseguró que “cuando traté de hablar por mí misma, me dijo que cerrara la boca. Dijo que no merecía tener ese trabajo”. Ahí fue cuando “lo entendí completamente, y estaba lista para decir, ‘Este es tu programa. No estoy aquí para ser irrespetuosa’; pero en ese momento, ya habíamos pasado el respeto y ella solo estaba abusando de su poder”.
En cuanto a las disculpas que publicó Lea Michele en sus redes sociales, donde Ware además la criticó por ocupar la palabra «percibir», indicó en Variety que el texto lo único que hizo “fue afirmar que no había aprendido nada”.
“¿Estoy llamando a Lea racista? No. ¿Lea tiene tendencias racistas? Creo que Lea sufre un síntoma de vivir en este mundo en una industria que se adapta a los blancos”, cerró.