Fotech.cl conversó con el célebre y querido actor Fernando Kliche, que tras dos años alejado de la pantalla, regresó con un atractivo rol de villano en «Amor a la Catalán», teleserie que Canal 13 transmite con buena repercusión en horario prime.
¿Qué te ha parecido volver a trabajar en una teleserie para Canal 13, donde fuiste principal rostro durante décadas?
27 años trabajé en este lugar maravilloso, del que tengo muchos recuerdos. Aunque queda muy poca gente de esa época, creo que todavía tiene esa mística. Canal 13 tiene una audiencia que es muy cautiva, que también ha sido fiel durante muchos años, y por esto es que no deja de ser una responsabilidad. Todo va marchando bien con «Amor a la Catalán», estamos haciendo un buen trabajo, y estamos seguros que el público lo merece.
¿Qué te ha parecido el resurgimiento del área dramática de Canal 13, con producciones como «Pacto de Sangre», a cargo de la productora AGTV?
Me parece fantástico. Lamentablemente, pienso que uno de los fenómenos que determinó que la teleserie se fuera un poco a las «pailas», era precisamente porque las producciones estaban empezando a caer, no sólo en calidad, si no en cuanto a las temáticas también. Son fenómenos de crisis transitorias, donde se pasa de un escenario a otro, y ahora estamos saliendo de eso. Me encantaría que Canal 13 volviese a recuperar el sitial que nunca debió perder.
¿Crees que el género de la teleserie está pasando por un proceso de transformación, y que eventualmente, ya no serán hechas para TV abierta?
Sí, yo creo que vamos para eso. Y no solamente en la televisión, la sociedad en general se está transformando; ahora se compra la comida por teléfono, se puede cambiar ropa por teléfono, se paga todo con tarjeta, etc. Creo que todo va cambiando, pero definitivamente va cambiando con la sociedad. Siento que eso tiene cosas buenas y cosas malas, también, porque le hemos perdido el miedo a muchas cosas, pero también hay temas bastante graves que tratar. Ahí la TV tiene una gran responsabilidad en saber cómo mostrar ese tipo de cosas, idealmente aspirando a algo mejor, pero muchas veces se caen en privilegiar el rating, haciendo que se convierta en un arma de doble filo.
En ese sentido, ¿qué te ha parecido el trabajo que se ha hecho con la propuesta de «Amor a la Catalán»?
Creo que vamos muy bien. Esta teleserie es una comedia de tomo y lomo, porque si tú te pones a pensar, la vida del ser humano es una comedia, juega mucho con lo tragicómico, lo que la hace mucho más atractiva. Además, dentro de toda estas situaciones cómicas, es una reflexión muy optimista, es decir, después de todo los personajes no lo pasan tan mal, después de llorar se ríe, después de la tiniebla viene la luz. Ese es, más o menos, el mensaje que busca entregar la teleserie.
¿Cómo definirías a tu personaje de Pedro Catalán, al que ya hemos visto en cierta faceta antagonista?
Van a seguir viendo a un Pedro bien siniestro, la verdad (risas). Es el hermano mayor de Fernando Catalán, rol de Cristian Campos que fallece en el primer capítulo, que esconde muchos secretos, uno de ellos es el que ya se pudo ver, al ser amante de la viuda que interpreta Catalina Guerra («Isabel»). Es un rol bien particular, que se trae diversas jugadas bajo la manga, y seguro se va a ganar el odio de muchos. Sigan viendo la teleserie todas las noches, porque les aseguro que se van a sorprender.