La semana pasada, la ex notera del «Bienvenidos», Chriss McMillan, canceló su matrimonio a dos días de realizar el enlace civil con su pareja Francisco Carrasco luego de que él se arrepintiera de todo. Múltiples fueron los mensajes de apoyo que recibió la profesional tras darse a conocer esta situación y, pese a que no ha querido hablar con la prensa, utilizó su propia plataforma para romper el silencio que había mantenido hasta el momento.
Es así como en su sitio web «Registro de una Novia», la periodista decidió entregar sus primeras palabras ya que, según consignó, » no hacerlo significaría ser hipócrita ante todo lo que he realizado y publicado durante todo este tiempo».
«Ya para nadie es un secreto que no me caso, lógicamente hubiese preferido que no se supiera en este momento ni de la forma en que se hizo público, porque yo aún no estaba lista ni lo tenía asumido, es más creo que todavía no lo estoy», publicó en el blog, donde creó un registro de todo lo previo que sería su ‘gran paso’.
Allí, quiso ser enfática en señalar que «si esperan encontrar detalles de por qué se canceló el matrimonio o por qué se terminó la relación, debo adelantarles desde ya que no hallarán ninguna información sobre eso. Ante todo le debo respeto al hombre que iba a ser mi marido y a su familia. Sólo puedo hablar por mí, lo que siento y lo mucho que se ha especulado en la prensa, que en su mayoría no es verdad».
A través de este mensaje, aclaró que la exposición que tuvo su blog en cuanto a su matrimonio no fue la verdadera razón del quiebre y que Carrasco siempre estuvo de acuerdo en que ella llevará esta especie de bitácora para compartir con sus seguidores. «Toda relación se basa en los actos de dos personas y cada decisión tiene sus causas, efectos y consecuencias. En nuestro caso son varios los hechos y situaciones que nos pasaron la cuenta, pero que pertenecen a nuestra vida privada», escribió.
Sobre su situación actual consignó que «soy una mujer aún profundamente enamorada y que no ha dejado de amar al hombre con el que se iba a casar y con el que tenía grandes proyectos de vida. Aunque jamás quise que ocuparan palabras tan privadas mías, efectivamente la pena es tan grande que sientes que te duele el alma y lo único que le pides a Dios es que te quite pronto este dolor y el amor que sientes por esa persona».
«No me cabe duda de que no era el momento para casarnos, no sé si alguna vez lo sería, pero el no poder aplazar la fecha del matrimonio y tener que enfrentarnos de golpe a la noticia de que nos casaríamos en dos semanas más, creo que no hizo más que empeorar las cosas», añadió.
Por otro lado, agradeció a todos quienes -sin conocerla- se dieron el minuto de poder entregarle una palabra de apoyo a través de las redes sociales. Sobre su futuro y lo que vendrá para ella, indicó que «vivir mi pena, cosa a la que me he dedicado estos días. Continuar rodeándome del amor de mis seres queridos porque en estos difíciles momentos me ha sorprendido saber que no estoy sola y que hay muchas más gente que me ama de la que yo misma pensaba. El cambio de look viene incluido y probablemente el de departamento también. Y llegó el momento de cumplir uno de mis grandes sueños, ese viaje que tanto he postergado por fin lo voy a realizar. Finalmente espero que llegue el olvido».