Hace sólo unos días, el destacado guionista chileno anunció a través de sus redes sociales que Sony había adquirido los derechos para convertir su libro, «El Filo de tu Piel», en una serie.
En conversación con Fotech.cl, José Ignacio Valenzuela, el «Chascas», se refirió a esta noticia que lo tiene lleno de felicidad.
José Ignacio, ¿qué significa este logro en tu carrera?
Todavía no soy muy capaz de analizar fríamente los beneficios para mi carrera, porque aún estoy en la etapa emocional de la noticia. Estoy feliz y muy contento de saber que un gigante como Sony consideró que un texto mío estaba a la altura de sus requisitos. Me imagino que hoy en día las series están empezando a explorar temas más de nicho, donde el compromiso emocional de la audiencia con los personajes sea muy poderoso. Y «El filo de tu piel» tiene eso: a lo largo de sus catorce años de vida, el libro ha conquistado muchos lectores porque los hace sentir cosas. Por lo mismo, creo que Sony estaba buscando una historia de ese tipo y encontró en mi libro esa conexión. Estoy seguro que en un tiempo más podré contestar mejor esta pregunta, pero por ahora, sólo tengo comentarios sueltos y algo incoherentes de pura felicidad.
¿Cómo se logró concretar?
Ana Bond, la VP sénior y directora general de Producción Internacional para Latinoamérica de Sony Pictures Television, leyó «El filo de tu piel» y, al terminarlo, se puso en contacto conmigo. Me comentó que le pareció una historia muy emotiva, muy transversal a pesar del tema, y que podría verse muy bien en la pantalla. Lo siguiente fue poner a conversar a mi agente literaria en España -para la compra de los derechos audiovisuales-, a mi agente en Los Ángeles, y a los abogados de Sony. Digamos que fue un verdadero trabajo en equipo que tomó unas semanas en llegar a destino. Lo divertido, y al mismo tiempo estresante, era que yo sólo veía de lejos a todas estas personas intercambiando emails, comentarios y contratos sin que yo pudiera hacer o decir nada.
¿Qué se siente que un gigante de la industria como Sony esté atento a tus libros?
Claramente es un sueño hecho realidad. Un honor con el que, honestamente, me cuestiono a diario si estaré a la altura. Recuerdo que cuando escribí el libro, allá por los años 2003, 2004, siempre pensé que sería una buena historia de ver en una pantalla. En un primer momento pensé que podía llegar a ser una película. Pero con el tiempo, y con el auge de las series de streaming, decidí que la mejor vida que podía darle a «El filo de tu piel» era una historia en capítulos. Que una empresa como Sony haya tenido la misma idea que yo, no sólo me emociona, sino que me llega de entusiasmo por lo que viene. No puedo creer que exista una posibilidad de ver a Diego y Ulises, los protagonistas, de carne y hueso.
¿Vas a estar implicado en el proyecto?
Sí, yo voy a escribir los capítulos, además de ser uno de los productores ejecutivos de la serie. Estoy en este momento en plena etapa de desarrollo de la historia. ¡La parte más entretenida!
¿Qué elenco te gustaría tener?
Soy incapaz de visualizar en este momento a actores para la historia. Con la gente de Sony necesitamos resolver muchas cosas antes antes de empezar a pensar en ese tema, pero sé que por la magnitud del proyecto contaremos con los mejores.
Si te dieran a elegir, ¿qué otro libro llevarías a las pantallas de televisión o cine?
Sin duda mi trilogía del «Malamor», y espero que sea un sueño que se me cumpla en un futuro no muy lejano. Una casa productora de Los Ángeles compró también los derechos audiovisuales de los tres libros, por lo que es una ilusión que tiene al menos una primera parte cumplida. Pero «Malamor» no es un proyecto simple, ni fácil de realizar. De hacerse efectivo, sería una mega producción, con efectos especiales, grabaciones en la Patagonia, con un montón de actores, etc. El día que eso suceda, si es que sucede, tendré que tomar algún calmante para aguantar la ansiedad.
En Chile comenzaron a emitir las teleseries de los años 90 – 2000 con gran éxito. ¿Qué opinas de ello?
Las telenovelas de esas décadas son producciones fabulosas, hechas por profesionales de la materia, a las que se les dedicó todo el tiempo y la atención del mundo. Es un trabajo del que todos nos sentíamos orgullosos. Además, los canales respetaban en pantalla esos productos y los trataban con infinito cariño. Y estoy seguro que la audiencia responde a eso. ¿Cómo le podemos pedir a la gente que regrese todos los días a ver nuestra historia, si nosotros como canal somos los primeros en faltarle el respeto al producto al cambiarlo de horario, de día, y cortarlo sin aviso ni criterio? La teleserie genera un vínculo emocional muy poderoso con la audiencia, y las de los años 90’s y 2000’s se construían para eso. Por eso las recordamos con tanta nostalgia: porque nos regalaron emociones y nos hicieron sentir cosas.
¿Sientes que la gente se quiere reconectar con esas historias donde se observa de mejor manera los personajes chilenos?
Absolutamente. Una buena telenovela debiera ser un espejo en el cual la sociedad se pueda ver reflejada. Y no deja de ser curioso que todas esas telenovelas de los 90’s y de los 2000’s fueran, de alguna manera, telenovelas autorales. La gran mayoría tenía detrás a un autor profesional, con un mirada propia y con una intención artística. Estoy pensando en Sergio Vodanovic, Jorge Marchant, Fernando Aragón, Araldo Madrid, Pablo Illanes, Víctor Carrasco, entre otros. Eran teleseries concebidas por un escritor que tenía que presentar, desarrollar, defender y luego escribir sólo su proyecto. A veces siento que la nueva cultura, donde un gran equipo de dialoguistas, que siguen la ruta de una escaleta hecha en largas sesiones de trabajo, le quita frescura, espontaneidad y sabor a una historia. Se siente poco al autor en un trabajo así. Y creo que eso se nota en pantalla.
¿Cuál es tu teleserie favorita?
“Los Títeres”, de Sergio Vodanovic. ¡Sin duda!